Ramón Gustavo Castillo Gaete (35), también llamado ”Antares” y líder de la secta de Colliguay que quemó a un bebé en un sacrificio para evitar el fin del mundo, fue hallado muerto ,colgado de la viga de una vivienda abandonada ubicada en las cercanías de la fortaleza de Sacsayhuamán, en Cusco. El sujeto al momento del hallazgo presentaba la barba recortada y se pudo confirmar su identidad a través de sus huellas dactilares
Se ahorcó al interior de una vivienda abandonada en el Cusco.
Entre las características de este hombre estaba el narcisismo que se combinaba con un alto poder de convencimiento y seducción, según afirmaron algunos expertos.
El cadáver se hallaba dentro de una vivienda de adobe abandonada, de cuatro pisos, ubicada en el sector de Sapi, en el Cusco, a cuatro cuadras de la Plaza de Armas. En un inicio, se informó que el sujeto tenía apariencia extranjera y la barba recortada, pantalones jeans y una casaca impermeable. Tras verificar sus huellas dactilares, se contrastó con la base de datos de la Policía chilena y se confirmó su identidad.
La Policía mantiene acordonada la zona y ya llegaron al lugar los peritos de Criminalística de la Policía y del Ministerio Público, encabezados por el fiscal Iván Loo Su para el reconocimiento del cadáver.
Como se recuerda, la opinión pública se conmocionó con la notica del homicidio de un bebé que fue quemado vivo, durante un ritual satanico cometido en la localidad de Colliguay, en Chile.
El macabro sacrificio del bebé se produjo en noviembre del año pasado, en una pequeña localidad cercana a la ciudad de Valparaíso, a unos 100 kilómetros de la capital chilena. La secta estaba integrada por profesionales, gente con formación y buen empleo, que hacían donaciones a su líder, que “se autodenominaba Dios”.
