Días antes de ser nombrado Cardenal por el Papa, el Mons. Pedro Barreto, Arzobispo de la Diócesis de Huancayo, estuvo en Tacna disertando en el Primer Congreso Ecuménico realizado en el auditorio de la Catedral de Tacna.
Arzobispo jesuita fue nombrado Cardenal por el Papa Francisco.
Este domingo, el Papa Francisco nombró como Cardenal al Mons. Pedro Barreto, Arzobispo de la Diócesis de Huancayo. Apenas, tres días atrás, él estuvo en Tacna disertando en el I Congreso Ecuménico “Cuidando nuestra Casa Común”, realizado el 17 de mayo en el auditorio de la Catedral de Tacna.
#PapaFrancisco nombra como #cardenal al arzobispo de #Huancayo, Pedro Barreto â–º https://t.co/vdUBQNRGHj @Pontifex_es #Perú 🇵🇪#NuevoCardenal
— radio uno (@radiouno_pe) 20 de mayo de 2018
En aquella oportunidad (17 de mayo), Barreto tuvo a su cargo el contenido de la Encíclica del Papa Francisco “Laudato Sí” y algunos datos reales sobre el daño que está sufriendo nuestro medio ambiente y la Amazonía.
“A través de la Laudato Sí, el Papa nos hace un llamado a todos, a subirnos a una sola barca sumando esfuerzos para preservar nuestro planeta, la Casa que Dios nos ha regalado.” enfatizó al término de su ponencia en Tacna.
Los panelistas invitados concluyeron que “Todos debemos unirnos, esforzarnos y capacitarnos para cuidar la Creación de Dios -nuestro planeta- pensando en el bienestar de la humanidad y en las futuras generaciones.”
Aquel día, el panel de líderes de las Iglesias Cristianas y la comunidad Musulmana dieron a conocer las diferentes acciones que vienen realizando para cuidar el Medio Ambiente. Así también, participó el Secretario General de Cáritas Chota – Cajamarca, Pbro. Gregorio Alarcón quien mostró los proyectos Ecológicos y sociales que vienen realizando a favor de las personas más pobres de la zona.
El Obispo de Tacna y Moquegua, Mons. Marco Antonio Cortez Lara, agradeció a todos su participación y entregó a los panelistas un reconocimiento “Por su contribución en el Cuidado de Nuestra Casa Común”. Al término, instó a los presentes a continuar trabajando unidos, desde sus comunidades, por el bienestar de toda la creación de Dios.
