“Los presidentes vienen a participar no vienen hacer su circo político, no vienen a hacer su propaganda”, expresó Carlos Romero Bartesagui al referirse al «balconazo» que el mandatario Pedro Castillo protagonizó en Tacna el 28 de agosto.
Según refirió, el baño de popularidad del presidente de la República no estaba contemplado en los protocolos coordinados con el grupo de avanzada de Lima. Tal actividad motivó que un grupo de simpatizantes de Perú Libre evada el cordón de seguridad y terminen rodeando el expalacio municipal al cual ingresara Castillo. Para el acto político fue usado el pabellón nacional, emulando la Procesión de la Bandera, hecho que desató numerosas críticas.
Para el presidente de la Benemérita Sociedad de Artesanos y Auxilios Mutuos «El Porvenir» Castillo contó con la anuencia de las autoridades locales.
“Yo entiendo es por congraciarse con el presidente para obtener lo que no pueden conseguir con sus acciones. Que nos den migajas de poder, que nos den migajas de presupuesto para poner una calle o hacer algo”, acusó.
“Yo creo que los tacneños tenemos que tener el mismo espíritu que se mantuvo en el Cautiverio y si el equipo de avanzada viene a imponer cosas que no corresponden entonces las autoridades se paran y el pueblo se retira y haz lo que te de la gana, pero nosotros mantenemos nuestra tradición y nuestra historia”, destacó.
Romero Bartesagui se encuentra fuera de Tacna por motivos de salud, pero una vez arribe a la ciudad convocará a las instituciones patrióticas a una reunión zoom de emergencia para “fijar cuál es la ceremonia y qué es lo que los tacneños debemos hacer todos los años y de ahí no debemos apartarnos ni un ápice y todos comprometernos”, detalló.
Además, como presidente de la Sociedad de Artesanos anunció que exigirá “a este Gobierno a través de pronunciamientos, que comenzaron ayer y seguirán todos los días, para lograr de que el Gobierno pida perdón al pueblo de Tacna, no por este hecho aislado que puede ser coyuntural si no por toda la historia y toda la tradición”.
“Solo los bueyes bajan la cabeza para que el agricultor le ponga el yugo. Nunca el pueblo de Tacna ha bajado la cabeza y es lo que tenemos que mantener”, sentenció.
