HAY QUE MIRAR EL ROSTRO DEL PERÚ EN EL ROSTRO DE LOS NIÑOS
La historia es viviente, tiene un discurrir un cauce palpitante que surca la vida y vence el tiempo y sirve para sacar a los hombres de si mismos para colocarlos en una constante relación en el mundo en que viven, para hacerlos actores vivientes y consientes del acontecer y devenir de los pueblos, actitud que debemos asumir todos como el mejor homenaje a Tacna al recordar 78° aniversario de su reincorporación al seno patrio.
Es tiempo de superar los sentimentalistas superfluos que nos hacen vibrar un 28 de agosto. Es tiempo de vencer el silencio, el conformismo, la apatía. Es tiempo de amar a la tierra con la fuerza que genera conocerla para proseguir la tarea soñada por Jorge Basadre; la necesidad de desarrollar la consciencia patriótica mirando al Perú como una posibilidad y como una promesa por cumplir. Es tiempo de esperanza tiempo de mirar el rostro del Perú en el rostro de los Niños, para construir la Patria que nos merecemos, la Patria que el tiempo nos robo.
No nos detengamos solo en la evocación del sacrificio y de la abnegación de nuestros antepasados que ofrendaron sus vidas por defender el honor y la integridad de la Patria, es hora de trabajar con Tesón y honestidad, con esta perspectiva debemos trabajar prioritariamente por la Educación, pensando que son los hombres la verdadera riqueza que tienen los pueblos, pues solo una generación solidamente educada en valores será capaz de lograr el progreso y el desarrollo del país.
Formulamos fervientes votos por el progreso y el desarrollo, trabajando con pasión y devoción por la bendita tierra de Tacna.