La congresista nacionalista María Sumire, afirmó que los enfrentamientos producidos en la provincia Espinar – Cusco, que cobraron una víctima mortal el último jueves, pudieron haberse prevenido si el gobierno central iniciaba el dialogo con los pobladores y daba solución al problema hídrico que se registra en la zona.
“Las organizaciones de la provincia de espinar han entrado en huelga indefinida por la situación del problema del agua, que no es de ahora es de hace tiempo que van reclamando al gobierno central, al gobierno regional porque Espinar no cuenta con agua potable y tampoco las comunidades que están alrededor”.
Dijo que la adjudicación de la buena pro de la concesión de las obras de afianzamiento hídrico del proyecto de irrigación Majes Siguas II, sólo beneficiarán los negociados del ejecutivo, y no a los pobladores de la ciudad de Arequipa.
“No sé qué tratos tiene con las empresas extranjeras porque favoreciendo a las empresas saca este proyecto Majes Siguas II. Porque no es para la ciudad de Arequipa, no es para las comunidades campesinas de Arequipa, más bien es para el negociado del gobierno y lamentablemente tenemos ahora un padre de familia muerto”.
La legisladora por Cusco, afirmó, que la muerte de Leoncio Fernández Pacheco, de 47 años, quien laboraba como personal de vigilancia de la Universidad San Antonio Abad fue ocasionada por los efectivos policiales que irrumpieron en la plaza principal de Yauri, donde se realizaba un mitin, lanzando bombas lacrimógenas y disparos.
IGLESIA COMO MEDIADOR
Por otro lado manifestó que para esta tarde, se ha previsto la llegada a Espinar (Cusco) del presidente de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP), monseñor Miguel Cabrejos, para mediar entre el Ejecutivo y el Frente de Defesa de dicha provincia.