¿Cuántos días más vamos a esperar? se pregunta una madre de familia de nacionalidad Venezolana, atrapada entre Tacna y Arica desde hace una semana junto a sus dos hijos, su esposo y sus suegros adultos mayores. Así como ella, otros núcleos familiares sumando más de un centenar se hacen la misma pregunta en la línea de Concordia.
Radio Uno pudo recoger el testimonio en un llamado célere a las autoridades que al momento si bien plantean un corredor humanitario, nada es concreto aún. Ante la incertidumbre, Rosmery Morales, aseguró no tener problema en pagar el transporte pues afirma tampoco querer algo gratis si con ello consigue poner a buen recaudo a los suyos, entre ellos su menor asmática.
No dudó en brindar una y otra vez declaraciones ante cuanto medio de prensa se le acercaba, pese a evidenciar en su rostro cansancio producto del abrazador sol e inclemente frío que le han dejado varios días de estar durmiendo en el desierto.
Dijo no ser migrante irregular, haber cruzado con documentos Perú y Chile hasta radicar en este último consiguiendo lo que denominan «La permanente», pero una vez explotado el rechazo a foráneos le fue imposible renovar sus papeles que hoy vencidos no son aceptados por Migraciones de Perú.
«Si ellos desconfían que uno se va a quedar en Perú (…) pueden escoltarnos. El que se quiere quedar, ellos tienen que ser sancionados, pero las personas que realmente quieren cruzar a su destino que le den esa oportunidad«, manifestó a Radio Uno.
