El gobierno de Ecuador decidió anoche continuar con el estado de excepción por tiempo indefinido en la ciudad de Quito mientras que se levantó en el resto del país, tras ser decretado el 30 de septiembre por un intento de golpe de Estado.
Así lo anunció el ministro de Seguridad Interna y Externa, Miguel Carvajal, quien señaló que el gobierno evaluará las condiciones que permitan retirar el estado de excepción en la capital ecuatoriana, informó la agencia alemana DPA.
El ministro aclaró que no están restringidos reuniones ni eventos públicos y anticipó que la Asamblea Nacional seguirá resguardada por los militares, en amparo de esta medida.
El estado de excepción se dictó el jueves 30 de septiembre hasta el martes 6 de octubre, cuando se lo amplió hasta este viernes a la medianoche, día en que dejó de regir para el territorio nacional, a excepción de Quito, como informó Carvajal.
Los hechos del 30 de septiembre, se iniciaron con una rebelión de la tropa policial y de un sector policial quienes agredieron y luego mantuvieron retenido al presidente Rafael Correa en un hospital de donde salió tras un operativo militar.
El gobierno ecuatoriano recibió el apoyo de la comunidad internacional, especialmente de los países miembros de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) quienes elaboraron, en una reunión convocada de urgencia en Buenos Aires, un duro documento contra la intentona golpista.
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