Un artefacto explosivo ha estallado hoy en la embajada suiza en Atenas, después de la remesa de paquetes bomba de ayer, en la que la policía interceptó tres, uno de ellos dirigido al presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, y los otros a distintas embajadas y un cuarto llegó a estallar, hiriendo levemente a una mujer. Hoy, ha estallado uno en la embajada de Suiza, sin que se haya informado de heridos. También la embajada búlgara ha denunciado la presencia de un paquete sospechoso junto a uno de sus muros, lo que ha obligado a acudir a la policía.
Según ha relatado un portavoz de la policía griega a la agencia Reuters, "una pequeña bomba ha estallado en la Embajada suiza en Atenas, no hubo llamada de aviso". Tampoco hay hasta el momento constancia de que alguien haya resultado herido. La agencia France Presse informa de que, al parecer, un desconocido ha lanzado el artefacto, de escasa potencia, al patio del recinto, donde ha estallado sin causar daños personales.
Esta misma mañana, la Embajada de Bulgaría ha sido objetivo de un incidente similar. Los empleados han alertado de la presencia de un paquete sospechoso en el interior de la legación, por lo que la policía ha acudido para detonar el paquete de forma controlada.
Mientras, la agencia AFP informa de que una patrulla de policía que circulaba por el barrio ateniense de Phalere, al sur de la capital griega, ha sido tiroteado, sin que se sepa por el momento si hay heridos en este incidente.
Los hechos se producen un día después de que otros cuatro paquetes bomba pusieran en alerta a la policía de la capital griega. Uno de los paquetes, destinado a la Embajada de México en Atenas, estalló en la sede de la empresa de mensajería Swiss Mail, causando quemaduras leves a una empleada. Poco después, otros tres paquetes fueron interceptados por la policía. Uno de ellos iba dirigido al presidente francés, Nicolas Sarkozy, y los otros dos, a las embajadas de Holanda y Bélgica. Dos hombres fueron detenidos. La policía descartó que estos envíos tuvieran relación con Al Qaeda y apunto a grupos antisistema y de extrema izquierda.
Las autoridades helenas, que ya estaban en estado de alerta para localizar otros posibles paquetes-bomba, han remitido a las empresas de mensajería recomendaciones para detectar bultos sospechosos y han advertido al personal de todas las embajadas sobre el peligro potencial de envíos por correo.
Cortesía: El País