La Conferencia Anual de Ejecutivos (CADE) 2010 realizado en la localidad de Urubamba en el Cuzco, fue la prueba de fuego de los candidatos presidenciales, por el nivel de los panelistas, señaló el legislador fujimorista Carlos Raffo.
"Creo que ha sido un inicio exigente por el nivel de los panelistas, ha sido una prueba de fuego, estamos muy satisfechos", declaró a Andina.
Refirió que la participación del ex presidente Alejandro Toledo fue una vez más "mostrando sus dotes de camaleón político, para cada auditorio, dirigido a los empresarios, con su estilo disforzado y engolado".
Indicó que en el caso de Ollanta Humala, trató de "hacer consistentes sus inconsistencias, tratando de modular sus propuestas, pero mostrando su postura radical, con un lenguaje violento, propio de la persona que no tiene nada que ofrecer y se dedica a atacar a los demás".
Señaló que durante su participación, el ex alcalde de Lima metropolitana, Luis Castañeda, se mostró "visiblemente nervioso, incómodo y hasta molesto en su presentación", y luego dejó plantada a la prensa, con una actitud poco cortés a los periodistas.
Respecto a la candidata de su agrupación política, Keiko Fujimori, señaló que su discurso fue "estructurado, ordenado y quizás los panelistas fueron especialmente exigentes, cosa positiva, porque estuvo a la altura de las circunstancias, y estuvo poco a poco ganándose al auditorio, con disposición a tocar temas difíciles"
Indicó que Keiko Fujimori no se dedicó a atacar a nadie, e hizo un deslinde con los temas negativos, sobre los cuales había mucha expectativa del auditorio.
"En una palabra: Toledo, demagogia; Castañeda, fastidio; Humala, contradicciones; y Keiko, sinceridad", puntualizó Raffo.
Cortesía: Andina