En calle Julio Rospigliosi y Olga Grohmann, dos vehículos colisionaron, uno de placa Z3M – 600 (color plomo) terminó a centímetros de quedar empotrado contra una vivienda de número 708, mientras que el otro de matrícula A3V- 443 (color rojo) resultó con la parte frontal completamente destrozada.
Pudo ser tragedia. Un testigo del accidente de tránsito dijo a Radio Uno que una madre y su niño que transitaban por la zona por poco y fueron alcanzados. En tanto, aseguró que del auto rojo descendió el chofer en evidente estado de ebriedad que fugó de la zona abandonando la unidad.
«Encontré que el señor se bajó y estaba borracho, movió el carro para allá y de ahí se ha ido, lo ha dejado, el rojo», afirmó.
De la unidad ploma se supo que viajaban – según testigo- «dos niños, una señora y el chofer», este último trasladado a la dependencia policial para diligencias de ley que establezcan responsabilidad en el hecho.
Una grúa acudió a la zona trasladando la unidad roja de lunas polarizadas a la comisaría González Vigil para investigaciones. Y se ha conocido que en la zona hay un disco «pare» que la unidad siniestrada no habría respetado chocando de manera lateral contra el carro plomo, dejando en este incluso rastros de pintura en el aro de la llanta delantera derecha. Esto aún está en indagaciones a ser confirmado por la PNP.
Por versión de vecinos, este sería el conductor fugado: