La ceremonia central por los 145 años de la Batalla del Campo de la Alianza que estuvo a cargo del Patronato presidido por el alcalde provincial Pascual Güisa, se mostró restrictiva al público que se dio cita para los actos protocolares en homenaje al 26 de mayo de 1880.
«Público preferencial» obtuvo acceso a graderías mientras el resto quedó viendo las actividades tras un cordón de policías y Serenazgo de la comuna provincial. Culminado los actos y marchadas los invitados del burgomaestre, permitieron el paso de asistentes quienes pugnaron por ingresar al museo de sitio.
Se observó gran desorganización para permitir un fluido avance de los espectadores, y una vez dentro del reducido espacio no era apreciado un guía que explique las reliquias del enfrentamiento con Chile, dando con ello mayor avance de la larga fila que se hallaba en exteriores.