Entre 200 a 250 trabajadores de Construcción Civil, provenientes de la provincia de Ilo, se congregaron hoy miércoles 9 de julio en los exteriores del Gobierno Regional de Moquegua para manifestar su profunda preocupación y rechazo ante la posible suspensión de diversas obras ante el recorte presupuestario de 115 millones de soles realizado por el gobierno nacional, lo que ha llevado a la gobernadora regional a anunciar la posible paralización de obras no solo en Ilo, sino también en la provincia de Mariscal Nieto (específicamente en los distritos de San Cristóbal, Cuchumbaya y Carumas) y en la provincia General Sánchez Cerro.
La gobernadora Gilia Gutiérrez se encuentra actualmente en Lima gestionando la devolución de este monto. Sin embargo, se ha indicado que el gobierno nacional solo estaría dispuesto a devolver 50 millones, una cifra muy lejana a los 115 millones de soles que la región exige y que los manifestantes demandan para la continuidad de las obras.
Más allá del tema presupuestal, los trabajadores de Ilo han elevado serias acusaciones de corrupción y favoritismo en la asignación de empleos en las obras públicas. Según los manifestantes, desde el inicio de la actual gestión, se estaría favoreciendo exclusivamente a personas allegadas a la agrupación política que llevó a la gobernadora al poder.
Una comisión de dirigentes de construcción civil de Ilo fue recibida en los interiores del gobierno regional por el gerente regional, el ingeniero Abraham Ponce Sosa, y su equipo técnico. Los manifestantes han sido enfáticos en su principal demanda: que la gobernadora «dé la cara» y los atienda personalmente. Han advertido que, si no son escuchados por la máxima autoridad regional, permanecerán en Moquegua.