Con la venía de funcionarios del municipio provincial, esta madrugada cerca de un centenar de comerciantes ambulantes tomaron la Av. Pinto para colocar sus stands de venta e iniciar una feria ambulatoria. Lo más lamentable es que hasta el propio jefe de Seguridad Ciudadana habría estado coordinando con una dirigente la ubicación de puestos y empadronamiento de ambulantes y hasta los invasores indicaron haber sido autorizados por el municipio.
CAOS ha generado en Tacna la súbita decisión del municipio provincial de autorizar la invasión de las calles para el comercio ambulatorio
En un hecho lamentable y que originó un absoluto caos en la Av. Pinto y calles aledañas al distrito Alto de la Alianza, esta madrugada cerca de un centenar de comerciantes ambulantes tomaron las calles de la zona avalados por una supuesta autorización del municipio provincial y resguardados por personal de serenazgo encabezado por el jefe de esta área.
Así lo constataron reporteros de RADIO UNO, quienes desde temprano estuvieron en el lugar de los hechos y se percataron de la ingrata noticia que nuevamente las calles habían sido blanco de ambulantes. Según los propios comerciantes esta invasión se habría producido con la venia de la Municipalidad Provincial de Tacna (MPT) y gracias a esta venia decidieron apostarse en una de las vías de la Av. Pinto, entre la avenida Industrial con Jorge Basadre.
Según los mismos comerciantes, la decisión de invadir la calle ubicada frente a Polvos Rodados ya estaba coordinado con los funcionarios de la MPT. Tal es así que el mismo jefe de Seguridad Ciudadana de la comuna provincial, Jorge Girón Begazo coordinaba con una dirigente de las comerciantes de nombre Vilma sobre la ubicación y empadronamiento de aquellos ambulantes que no habían sido considerados.
Los ambulantes también indicaron que si el alcalde de Alto de la Alianza no autoriza al igual que el municipio provincial, la invasión de las calles, quemaran el árbol que se encuentra al frontis de la sede edil y realizarán desmanes contra el municipio. El argumento de los comerciantes, es que no pueden instalarse en el estadio Maracaná debido a que el lugar no es seguro y no está adecuadamente acondicionado para la venta de ropa y juguetes.
“Ni un paso atrás, queremos trabajar”, fue una de las muchas arengas lanzadas por los ambulantes, junto con varias amenazas a la autoridad edil de Alto de la Alianza. Según se pudo constatar, estos ambulantes venían preparados con sus stands y mercadería como si dieran por hecho que se quedarían en la zona.