En la avenida Leguía, frente a la discoteca Karú, en horas de la tarde se realizó el inicio de la reconstrucción de los hechos del caso por el homicidio de María del Rosario, mujer que fuera hallada muerta por 18 puñaladas en su departamento, donde se producía un incendio.
Tras admitir la autoría del crimen contra la madre de familia, Rafael Espezúa Mamani fue trasladado por los efectivos policiales de la Divincri y policía motorizada hasta el lugar de la primera escena, afuera de la discoteca, donde se realizó el recojo de la víctima en la madrugada, con miras a conocer dónde la esperó y el recorrido realizado hasta su vivienda.
El sujeto llegó a la escena acompañado de la policía nacional, con el chaleco de homicidios y con capucha. Al lugar se apersonó la fiscal Iris León y, con los abogados presentes, se preparó todo para participar de la recreación.
Causó un poco de suspicacia que no se dio el cierre de tráfico en la zona, pese a que se conocía que se contaría con personal policial resguardando el lugar.