Rafael Espezua Mamani afronta audiencia de prisión preventiva hoy lunes 25 desde las 3:00 p. m. en la Unidad de Flagrancia. Él admitió que mató de 18 puñaladas a María del Rosario Romero Flores en su departamento el cual incendió en un intento de ocultar el macabro crimen.
El homicidio ocurrió la madrugada del domingo 17 al interior de la vivienda de la joven madre de familia ubicada en edificios de Enace en el distrito Gregorio Albarracín. Cámaras de seguridad del recinto permitieron a la PNP y Fiscalía establecer que este sujeto actuó solo y realizó hasta dos viajes. Salió llevando en una bolsa su cuchillo y ropas manchadas de sangre que arrojó en contenedores de basura inmediaciones de mercado Héroes del Cenepa y Ciudad Perdida por tienda Maestro. Estos objetos han sido confirmados por el acusado, pero no han sido recuperados por la PNP.
Llegó a su vivienda en Blondel n°76, a metros de la Sanidad Policial en el cercado de Tacna, abordó un taxi, llegó hasta un grifo en avenida Humboldt y compró combustible en una galonera que transportó en una mochila hasta la escena de crimen a la cual prendió fuego para luego marcharse siendo captado por cámara del conjunto habitacional.
No hay perdón
El acusado mantenía una relación amical con la víctima a quien conoció en un negocio de spa donde él laboraba como masajista. Acudió a Depincri al saber que lo buscaban, entró en contradicciones siendo considerado sospechoso y finalmente el 20 de agosto se quebró y confesó ante las pruebas en su contra. Durante la reconstrucción de hechos pidió perdón a la familia. El padre de María del Rosario ha expresado desde el lugar de la muerte que no hay perdón en su corazón a la vez de recordar cómo encontró a su hija «desnuda y calcinada».
«El hombre va a tener que pagar, sus errores que ha cometido, la desgracia con mi hija. El hombre está pidiendo conversar conmigo, pero no, para qué conversar, quiere que le de perdón, que se lo de Dios, yo no lo puedo dar, que la resucite para que ella este viva para que este con su hijo», expresó Marco Romero.
No es feminicidio
El caso ha sido tipificado por Fiscalía como homicidio calificado con gran crueldad. Según explicó la fiscal Iris León Bravo, el crimen no va como feminicidio al no cumplir las cuatro causales que se requieren para dicha calificación, como que se realice dentro de un entorno familiar, que exista coacción, que hubiera habido un delito en agresión a la mujer, o que se diera un hecho de discriminación o menosprecio por ser mujer.
En tanto, la prognosis de la pena es de más de 28 años, de acuerdo al Ministerio Público, ubicándola en el tercio intermedio de la pena que va del 15 a 35 años por este delito.
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