La Contraloría General de la República (CGR) inició la madrugada de este miércoles 3 un operativo de control multisectorial en la zona de frontera de Perú y Chile, con el objetivo de verificar la eficiencia y articulación de las entidades encargadas de la seguridad fronteriza y el control migratorio, verificando la ausencia de personal militar en la línea de frontera y el Hito N°1.
La presencia de la Contraloría se hace efectiva con el despliegue de auditores, quienes permanecerán en la zona durante esta semana en los principales puntos de vigilancia. Este equipo verificará la respuesta de la Policía Nacional, la Superintendencia Nacional de Migraciones y los ministerios de Defensa, del Interior y de Relaciones Exteriores ante el incremento de migrantes indocumentados en la zona de frontera y la declaratoria de emergencia en los distritos fronterizos de Palca, Tacna y La Yarada-Los Palos.
AUSENCIA DE PERSONAL MILITAR
Respecto a las acciones de seguridad, los auditores de la Contraloría General llegaron hoy hasta la línea de frontera en el Complejo Fronterizo Santa Rosa y el Hito 1, en donde se evidenció la ausencia del personal militar.
Sobre las acciones de seguridad, la Contraloría General supervisa si las labores del Ministerio de Defensa, la Policía Nacional y Ministerio de Relaciones Exteriores se efectúan con acciones y operaciones policiales de vigilancia y control de manera articulada en los puestos de vigilancia fronterizos de Santa Rosa y Francisco Bolognesi, conforme a las disposiciones internas y normativa aplicable.
Asimismo, se verifican las acciones que realiza el Ministerio de Interior para la conformación y el funcionamiento del Comando de Coordinación Unificado del departamento de Tacna, y los comités que lo componen, en cumplimiento del Decreto Supremo N° 135-2025-PCM que declara en Estado de Emergencia por seguridad los distritos fronterizos de Palca, Tacna y La Yarada-Los Palos.
MIGRACIONES
El operativo permitió verificar el proceso migratorio entre Perú y Chile, constatando el funcionamiento de módulos, equipos biométricos y espacios para control secundario, así como limitaciones en lectores de huellas y operatividad parcial del personal.
