El papa Benedicto XVI ha llegado hoy a Cuba para realizar una visita apostólica hasta el próximo miércoles, en la segunda y última parte de la gira latinoamericana que comenzó en México.
El papa estará en la isla dos días, del 26 al 28 de marzo. Fue recibido por Raúl Castro
El avión, un Boeing 777 de la compañía Alitalia, ha tomado tierra sobre las 14.20 hora local (19.20 GMT) en el aeropuerto de la ciudad oriental de Santiago de Cuba, a unos 950 kilómetros al este de La Habana.
«Llevo en mi corazón las justas aspiraciones de todos los cubanos», ha manifestado el Papa a su llegada, según Afp. En el aeropuerto santiaguero esperaban ya a Benedicto XVI el presidente de Cuba, Raúl Castro; el cardenal Jaime Ortega, máxima autoridad católica en la isla, y el presidente de la Conferencia de Obispos Católicos cubanos, Dionisio García.
«Vengo a Cuba como peregrino de la caridad, para confirmar a mis hermanos en la fe y alentarles en la esperanza», ha señalado Joseph Ratzinger.
En sus primeras palabras en la isla, Benedicto XVI ha recordado que la visita de su predecesor, Juan Pablo II, dio un «nuevo vigor» a la Iglesia católica en la isla e inauguró una etapa de «mayor colaboración y confianza» en las relaciones entre la Iglesia y el Estado.
Pero, ha añadido, «todavía quedan muchos aspectos en los que se puede y debe avanzar, especialmente por cuanto se refiere a la aportación imprescindible que la religión está llamada a desempeñar en el ámbito público de la sociedad».
Momento «especialmente importante» para Cuba
El pontífice ha manifestado que lleva en su corazón «las justas aspiraciones y legítimos deseos de todos los cubanos, dondequiera que se encuentren» y de modo especial «de los jóvenes y los ancianos, de los adolescentes y los niños, de los enfermos y los trabajadores, de los presos y sus familiares, así como de los pobres y necesitados».
El papa se declaró «convencido de que Cuba, en este momento especialmente importante de su historia, está mirando ya al mañana, y para ello se esfuerza por renovar y ensanchar sus horizontes».
A ello, prosiguió, cooperará «ese inmenso patrimonio de valores espirituales y morales que han ido conformando» la «identidad más genuina» del país. El pontífice rogó por que sean bendecidos «copiosamente» la tierra cubana y los que se sienten desfavorecidos, los marginados y cuantos sufren «en el cuerpo o en el espíritu», y pidió la intercesión de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre para que «conceda a todos un futuro lleno de esperanza, solidaridad y concordia».
Por su parte, el presidente de Cuba, Raúl Castro, ha destacado las «estrechas relaciones» entre la Santa Sede y su país en su discurso de bienvenida. «Nos satisfacen las estrechas relaciones entre la Santa Sede y Cuba, que se han desarrollado sin interrupción durante setenta y seis años, siempre basadas en el respeto mutuo y en la coincidencia en asuntos vitales para la Humanidad», ha dicho Raúl Castro.
También ha destacado que la constitución cubana garantiza «plena libertad religiosa» a todos los ciudadanos, en una alocución donde aprovechó para denunciar el bloqueo de Estados Unidos contra la isla.
El papa estará en la isla dos días, del 26 al 28 de marzo, y celebrará dos misas al aire libre, visitará el Santuario de la Caridad del Cobre, y se reunirá con el presidente Raúl Castro en el Palacio de la Revolución. La Iglesia insiste en que la visita del papa es pastoral pero muchos centran sus expectativas en los posibles mensajes «políticos» de Benedicto XVI quien rumbo a México manifestó que la ideología marxista ya no responde a la realidad, unas palabras que el régimen cubano acogió con «respeto».
La Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) ha informado este domingo de decenas de detenciones arbitrarias en los últimos cuatro días así como amenazas e intimidaciones a disidentes para que no asistan a las misas papales. El Gobierno, que considera a los disidentes contrarrevolucionarios y mercenarios pagados por Estados Unidos, advierte de que «fracasarán» quienes quieran «obstaculizar esta visita apostólica con manipulaciones políticas».
Segunda visita de un papa a Cuba
Cuba recibe la segunda visita de un papa de su historia, tras el viaje que en 1998 cursó a la isla Juan Pablo II. Tras su recibimiento, Benedicto XVI realizará en papamóvil un recorrido de doce kilómetros desde el aeropuerto hasta el Arzobispado de Santiago y posteriormente oficiará en la Plaza Antonio Maceo de la ciudad su primera misa en Cuba.
Durante las tres jornadas que permanecerá en la isla, visitará el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, cercano a Santiago, para luego viajar a La Habana, donde el miércoles oficiará otra misa en la emblemática Plaza de la Revolución, entre otros actos.
Este es el segundo viaje de Benedicto XVI a Latinoamérica después de su visita a Brasil en 2007, y el vigésimo tercero por el mundo en casi siete años de pontificado.
Cortesía:Rtve