Los vecinos de la asociación Jóvenes Unidos arremetieron contra la presidenta, exigiendo que renuncie al cargo que asumió hace dos años. «Es una estafadora, nos ha engañado» denunciaron los afectados, mientras que la mujer yacía inconsciente en el suelo.
Los vecinos exigieron la salida del cargo de presidenta de Angélica Larico Huarachi
El comisario del distrito Gregorio Albarracín junto a un contingente de las fuerzas especiales de la policía, llegó a la asociación Jóvenes Unidos donde los vecinos estaban a punto de linchar a la presidenta identificada como Angélica Regina Larico Huarachi, acusándola de haberlos estafado con S/.2000 y hasta S/.10 000 nuevos soles, que les solicitó para realizar diversos trámites y conseguir las conexiones de agua y electrificación en la zona. Sin embargo a la fecha, nada de eso se concretó, pese a que la dirigente llevaba en el cargo cerca de dos años.
“Estamos cansados de que esta señora estafe a la gente. Con la plata de nosotros se ha comprado muchos bienes, tiene carros y toda la vida nos ha engañado, nosotros pasamos hambre mientras que ella se enriquece con la plata del pueblo”, indicaron.
Según los moradores, que no quisieron identificarse, la presidenta se apoderó de más 10 lotes que distribuyó entre sus familiares dedicados –dicen- al robo de autopartes. Por ello ingresaron por la fuerza a uno de los predios construidos rústicamente, donde encontraron 3 cajas repletas de partes de vehículos además de dos machetes. También dejaron entrever que Angélica Larico tiene dos puestos en la Rotonda, lugar donde se venden respuestos para vehículos y en algunos puestos, autopartes obtenidas ilícitamente.
La policía y el representante del Ministerio Público, procedieron a levantar el acta de todo lo encontrado.
«NO RENUNCIARÉ»
Poco antes de ser detenida por los efectivos policiales la presidenta, Angélica Larico Huarachi, dijo brevemente que no renunciará al cargo y alegó que todos los trámites que realizó no tuvieron respuesta descartando haberse quedado con el dinero que solicitó a los vecinos. También confirmó que tiene puestos de venta en La Rotonda.
Este argumento no convenció a los denunciantes quienes se enfrentaron con la policía para evitar que la mujer sea llevada a la comisaría. Antes de dejar la asociación ellos reclamaban que firme un documento abandonando el cargo.