Fiscal de la Nación cuestionó el periodo fujimorista en que los funcionarios, los jueces y fiscales fueron nombrados a dedo.
21 años del autogolpe de Alberto Fujimori.
«Disolver, disolver temporalmente el Congreso de la República». Con estas palabras, el domingo 5 de abril de 1992, hace 21 años, el expresidente Alberto Fujimori cambió el curso de la historia en el país. A este hecho muchos lo recuerdan como el «autogolpe».
Tras el mensaje militares y tanques tomaron las calles. El Congreso de la República fue cerrado y no se permitió el ingreso al Palacio Legislativo. También se ordenó que se custodie la sede del Poder Judicial y otras dependencias estatales.
Aquel día Alberto Fujimori comenzaba lo que él denominó como su Gobierno de Emergencia y Reconstrucción Nacional.
El Fiscal de la Nación, José Peláez Bardales aseveró que el golpe que dio el ex presidente de la República, Alberto Fujimori, el 5 de abril de 1992 fue una época nefasta y ojalá que nunca vuelva a repetirse, porque significó el quiebre del ordenamiento democrático en el país: “ojalá que nunca vuelva a repetirse una cosa de estas, porque creo que la democracia es el mejor de los sistemas, que permite que todos puedan opinar o hablar y decir las verdades aunque no sean verdades muchas veces, eso es parte de la democracia”.
El fiscal de la Nación recordó que durante esa época todas las instituciones tutelares de la República fueron sojuzgadas por un gobierno que cometió una serie de tropelías. Recordó, del mismo modo, que los funcionarios, jueces y fiscales de ese periodo fueron nombrados a dedo: “Realmente a partir de esa época caímos en una situación tal que todas las instituciones tutelares de la República prácticamente estuvieron en una sola mano y sojuzgados por un gobierno que lamentablemente cometieron una serie de tropelías ya que no tenían ningún control. No había fiscalía, contaduría, Tribunal Constitucional, el Poder Judicial estaba sometido, el Ministerio Público también igual. Entonces, los fiscales y funcionarios y jueces fueron designados a dedo”.
“Creo que lo que hay que hacer es una reflexión en torno a que nunca más el país debe volver a una situación de estas que significa un quiebre del ordenamiento democrático en el país. Realmente esa época fue nefasta y creo que es parte de lo que acontece ahora en la vida nacional, el desprestigio de las instituciones en medio de todos los funcionarios y magistrados. Luego también un desprestigio total de estas instituciones y también caímos en una etapa de pérdida ética y moralmente de pérdida de valores completo”, aseveró Peláez Bardales.
Fuente:Ideeleradio.pe