La izquierda peruana está de duelo, este sábado 04 de mayo del 2013, a las 10.22 p.m., falleció Javier Diez Canseco (65)congresista de la República y reconocido político,debido al cáncer que padecía.
El Perú esta de duelo.
Diez Canseco, político y líder del Partido Socialista, como se sabe, reveló el 8 de febrero pasado que sufría de cáncer, a partir de eso estuvo internado en una clínica particular con la esperanza de superar la penosa enfermedad que le tocó padecer. La familia del parlamentario mantiene la reserva del caso ante lo sucedido.
«Encararé esta situación con la misma energía en defensa de la vida y los derechos fundamentales que he buscado tener durante toda mi trayectoria. Lo haré con la misma firmeza y decisión, contando con el invalorable apoyo de mi esposa y compañera, mis hijos y mi familia, de mis entrañables amigos y compañeros, y de los hombres y mujeres del Perú que creen que debo seguir batallando –con ellos- por un Perú nuevo en un mundo nuevo”, indicó entonces.
Julio Castro Gómez, dirigente del Partido, había señalado semanas atrás que el estado de salud del parlamentario de izquierda era delicado, ya que la enfermedad estaba avanzada.
El parlamentarío nació en Lima en marzo en 1948 y antes de que cumpliera un año fue víctima de la polio, mal que le dejó rezagos de por vida. Contó que permaneció casi un año tendido en una cama, con la pierna izquierda estirada y amarrada, porque el médico de su familia así lo recomendó.Nació en Lima en marzo en 1948 y antes de que cumpliera un año fue víctima de la polio, mal que le dejó rezagos de por vida. Contó que permaneció casi un año tendido en una cama, con la pierna izquierda estirada y amarrada, porque el médico de su familia así lo recomendó.
Acérrimo opositor del fujimorismo
Ante el proyecto autoritario de Alberto Fujimori, el legislador socialista se convirtió en uno de los críticos acérrimos del fujimorato y defendió, desde el inicio, las denuncias hechas por los deudos de las víctimas de Barrios Altos y La Cantuta en contra del grupo Colina, Vladimiro Montesinos y el ex presidente.
Incluso, durante un debate en el pleno en el 98, Diez Canseco se enfrentó a golpes al fujimorista Daniel Espichán. “Me mentó la madre tres veces y le metí un puñete”, así recordó el congresista ese momento.
Tras la caída del fujimorismo, insistió en la necesidad de revisar la Constitución del 1993 y retornar a las dos cámaras en el Parlamento.
En una de sus últimas columnas en el diario “La República”, afirmó que el informe de los médicos que evaluaron a Fujimori determina que no existen razones para que el presidente Ollanta Humala le dé el indulto al sentenciado a 25 años de cárcel por las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta.
“Los que impulsan la concesión del indulto saben que no hay razones para conceder dicha gracia presidencial y por ello se han visto en la necesidad de cambiar de estrategia. Han dejado de lado los argumentos y ahora lo quieren a la fuerza. Han pasado del argumento de la enfermedad terminal a razones que no tienen nada que ver con la situación de salud del ex presidente”, escribió.
Por otro lado como se sabe en los últimos meses, Diez Canseco presidió la Comisión de Relaciones Exteriores pero fue suspendido por 90 días a sugerencia de la Comisión de Ética del Congreso (con 53 votos a favor y 31 en contra) por haber presentado el proyecto de ley N° 054/2011 que supuestamente favorecía a su exesposa, Carmen María Montero Checa, y a su hija Lucía Paloma Diez Canseco Montero. El legislador acusó que el fujimorismo y el nacionalismo, dirigido por Nadine Heredia, coordinaron su castigo.
Finalmente, presentó una acción de amparo el 7 de abril del 2013 ante el Poder Judicial contra el Congreso de la República sosteniendo que sus derechos fueron vulnerados en la Comisión de Ética, que lo sancionó por una falta que no está tipificada en el código del grupo.
El recurso fue declarado fundado y nula la sanción por El Quinto Juzgado Constitucional, que despacha Hugo Velásquez Zavaletala “al haberse acreditado la violación de su derecho al debido proceso y al honor”. Sin embargo, el procurador del Congreso de la República apeló la decisión. En medio de esa polémica, la vida de Diez Canseco Cisneros se apagó.