Miembro titular de la comisión de Defensa del consumidor llegó a Tacna para dialogar con Aduanas Tacna a fin de verificar las condiciones en las que se dio el operativo que terminó con la incautación de una cargamento de juguetes, de una asociación de comerciantes legalmente establecida.
Congresista Ángel Neyra.
El congresista Ángel Neyra llegó a la ciudad de Tacna para atender el pedido de los comerciantes de la Asociación de Importadores Medianos del Perú (AIMPE), que presentaron una queja por la incautación de un cargamento de juguetes, ocurrida el pasado 20 de octubre.
Ese día, agentes de la SUNAT procedieron la incautación bajo la presunción de que la mercadería presentaba algunas inconsistencias en sus trámites de importación, al diferir de la descripción con la información de la ficha técnica según DIGESA.
Y es que verificaron que la aprobación de DIGESA era genérica y no especificaba detalles, sin embargo el parlamentario y miembro titular de la comisión de Defensa del Consumidor del Congreso aclaró que la ley no pide una descripción detallada de la mercancía y por lo tanto la incautación se produjo por una interpretación subjetiva de la SUNAT.
“Porque la ley no obliga, sino habría que cambiar la norma y pedir que inclusive se mande la ficha técnica, el certificado y todo para tener la garantía”, dijo.
Agregó que esta situación amerita una revisión de la norma a fin de mejorar su interpretación para dar más alcances y precisiones que sirvan al personal de Aduanas, Digesa y al mismo importador.
Asimismo indicó que deben incluirse temas específicos como el procedimiento para deshacerse de los juguetes que sean incautados de contrabando o que tengan agentes contaminantes que dañen a los niños.
«Porque el camino que sigue a la incautación también tiene que garantizar que no haya contaminación, porque ¿Cómo nos deshacemos de esos juguetes? ¿Los vamos a quemar? ¿Los vamos a enterrar? ¿Se los vamos a regresar al exportador chino? en esas cosas hay un vacío y no esta normado. Porque al final todos los juguetes así no envenenen a los niños es un plástico, es un contaminador al ser un desecho. la pregunta es ¿a dónde va? ¿al río Rímac? ¿al mar? entonces a quien le echamos la culpa», manifestó.