La casa con el nacimiento más grande de Tacna abrió sus puertas. Podrán visitar la tradicional parada navideña del 1 al 6 de enero.
A sus 90 años, Isauro Salinas continúa manteniendo vivo el espíritu de la navidad en Tacna. (Foto: Radio Uno)
Si de espíritu navideño se trata, uno de los mayores representantes en Tacna es la familia Salinas que año a año se unen para armar el nacimiento más grande en la ciudad, ubicado en la vivienda de la calle Zela N° 814, distrito de Pocollay.
El patriarca de los Salinas, Isauro Salinas, conversó con Radio Uno, expresando lo que realmente significa la puesta navideña que él y su familia lleva adelante cada fin de año.
“Como todos los años hoy abrimos las puertas para que todo el público cristiano y creyente en nuestro señor pueda venir a recordar que en este mes se inicia la preparación del adviento para así poder recibir con el corazón pleno de alegría y de esperanza el nacimiento de nuestro señor Jesucristo. Me encuentro muy contento y satisfecho y pido permiso para ingresar a sus hogares y recordar que estas puertas están abiertas en mi hogar para poder recibirlos y así tener un momento de recuerdo y encuentro con nuestro señor Jesucristo”, manifestó.
A diferencia de ocasiones anteriores, este 2016, el proyecto familiar no inició en noviembre como solía trabajarse, esto debido a “circunstancias familiares y tropiezos por enfermedades es que hemos empezamos en octubre con la esperanza de llegar a este día y abrir las puertas a todo el público. Gracias a Dios y bendiciones del niño hemos cumplido esta meta”.
La vivienda está decorada en su totalidad mostrando a los visitantes locales y extranjeros, la navidad en diferentes provincias del país. Además de numerosas luces que dan el detalle mágico que representa estas fechas de amor y paz.
La casa de Don Isauro Salinas abre sus puertas desde el 1 de diciembre al 6 de enero desde las 8 horas hasta el mediodía y por la tarde desde las 16 horas hasta las 19 horas.
Los asistentes deberán pagar un monto voluntario, dinero que será usado para organizar una chocolatada a los niños que estén presentes el día de cierre, 6 de enero.
“Debemos comprender que la navidad es una fecha en que se puede extender la mano al necesitado y el necesitado agradece por su intermedio a nuestro Señor”, finalizó.