En su primer día en Tacna, la presidente del Instituto Para la Seguridad Ciudadana (IPSC), Susana Villarán De la Puente, visitó la cabina de Radio Uno, donde dialogó con el espacio periodístico Impacto 1era Edición sobre temas referentes a la seguridad ciudadana en nuestra ciudad.
Villarán De la Puente manifestó que se deben distinguir primero los factores de la inseguridad, el crimen organizado o el pandillaje juvenil, para poder atacarlos de maneras represivas y sobre todo preventivas.
La presidente del IPSC indicó que en los casos de delincuencia juvenil, la mayoría de los actores –sino todos- provienen de familias disfuncionales, que han crecido con una serie de carencias emocionales, rodeados por un halo de violencia que ha invadido sus hogares y todo su entorno.
"En Tacna por ejemplo, hay que definir primero quiénes son y de dónde vienen los pandilleros de Ciudad Nueva; seguramente de una casa que los expulsa, de una ciudad que no los acepta, de un espacio sin empleo ni oportunidades de realización personal, tienen vida pero no un proyecto de vida ni de familia", explicó.
Para ello –continuó- se tiene que trabajar en la cantera, en los semilleros, en los barrios donde crecen los futuros delincuentes y darles buenos grupos de referencia y valores correctos
"Se ha logrado recuperar a chiquillos y chiquillas en Lima, que han encontrado en grupos de referencia como Martin Luther King y Ernesto "Ché" Guevara, grupos donde se les ha reconocido como personas, se les ha querido y ahora cuidan canchitas por un sol o trabajan llevando balones de gas en partes altas", comentó.
ESTRATEGIAS PARA EL CRIMEN ORGANIZADO
De otro lado, Villarán De la Puente remarcó que hay que buscar una tratativa diferenciada al problema del pandillaje y al del crimen organizado.
"Las pandillas es algo que se puede prevenir y no basta enfrentarlos, hay que enfrentar las peores formas de delincuencia, con firmeza, pero la seguridad ciudadana se logra conociendo la evolución concreta de qué tipos de delitos suceden y en qué determinado lugar", dijo.
Para ello, el IPSC elabora "Mapas del Miedo", ya puestos en práctica en Cajamarca, Junín, San Martín y Huancayo; sobre los focos identificados aplicar una política integral en la que se articulen los Comités de Seguridad Ciudadana.
"Esto es algo que está en ley pero que no se ha tomado mucho en cuenta, el alcalde, presidente de los comités distritales y provinciales de Seguridad Ciudadana, debe convocar a las organizaciones sociales, juntas vecinales, asociaciones de ambulantes, mujeres de comedores populares y vasos de leche, que finalmente son los más interesados en que se les garantice seguridad", puntualizó.
Además criticó la actitud de las otras entidades del Estado que también integran dichas organizaciones, destacando que los jueces de paz deben garantizar que los culpables de hurtos menores paguen sus faltas con trabajo comunitario, que el Ministerio de Educación forme escuelas para padres y que el Ministerio de Salud considere a la delincuencia como un problema de Salud Pública.
Sin embargo, la labor más importante es la que deben de cumplir los gobiernos locales y el gobierno regional, siguiendo un criterio de "Prevención Situacional".
"Cada terreno baldío es un hueco de comercialización es un lugar de asaltos, una calle mal iluminada es un lugar para el robo, un lugar sin recorrido de micros completo es un escenario de violaciones sexuales, sobre todo en asentamientos humanos… sin mover el tema de represión, con sólo prevención situacional, se debe regular mejor el comercio ambulatorio, el transporte publico, de debe trabajar en iluminación de vías, en certificación de taxis y mototaxis, revisiones psicológicas de transportistas, la integralidad es esa", culminó.