Mientras la población aguarda de manera pasiva, la realización de la asamblea en donde las autoridades deberán rendir informe sobre las negociaciones realizadas en la ciudad de Lima y las medidas que se adoptarán posteriormente,varios centenares de policías vigilan las diferentes arterias de la ciudad.
Efectivos policiales provenientes de Arequipa y Lima, acompañados de personal del Ejército Peruano aguardan la ocurrencia de cualquier desmán en la ciudad heroica.
Las fuerzas armadas se ubican principalmente en el centro cívico de Tacna y se encuentran resguardando las instituciones públicas, como el Banco de la Nación, Caja Municipal, Casa Basadre, entre otros locales.