Tras seguimientos e interceptaciones telefónicas, la Brigada Antinarcóticos (Briant) de Investigaciones de Arica- Chile desbarató una banda de compuesta por 8 narcotraficantes, cuyas líderes eran dos mujeres peruanas, las cuales traían sustancias ilícitas desde Tacna en taxis internacionales. En la operación denominada "Ginebra" fueron incautados 23 kilos 160 gramos de clorhidrato de cocaína, 1 millón 845 mil pesos, 1 camión Mercedes Benz año 1997, un automóvil Toyota 2007, una camioneta Ford Ranger 1997, y 11 celulares.
La policía detuvo a las peruanas Karen Gutiérrez Apaza y Teodocia Chura Aquino, y a las chilenas Gabriela Morales Nieves, las hermanas Yesenia y Yanizta Correa Chacano, y Juan Humberto Ruiz Golier. Otros dos detenidos fueron identificados sólo con las iniciales R.A.V.M. y R.V.B., debido a que ambos aceptaron acogerse a la "cooperación eficaz" facilitando la "entrega controlada" de la droga con un "agente policial encubierto" en Santiago y Ovalle.
Karen Gutiérrez y Teodocia Chura se organizaron para internar la droga y reclutaron a las chilenas Gabriela Morales y a Yesenia Correa, con el fin de que recepcionaran el alcaloide en Ovalle, a fin de no despertar sospechas de la policía chilena. La Brigada Antinarcóticos del vecino país requisó la droga luego que las extranjeras contrataran al camionero R.A.V.M. para trasladar los 23 kilos 160 gramos.
El hecho se produjo cuando la policía detectó que dos de las mujeres entregaron la droga en Arica al chofer, el cual al ser descubierto por los efectivos antinarcóticos chilenos en la salida sur de la ciudad de Arica, aceptó efectuar una "entrega controlada" en Santiago y Ovalle.
En Santiago, fueron detenidas las peruanas luego que estas instruyeran al camionero que se contactara por teléfono con Yesenia Correa, para que le entregara parte de la droga. Esta mujer contrató al taxista Juan Ruiz con el fin de que la trasladara a la ciudad chilena de Ovalle, donde el transportista R.A.V.M. le entregaría el alcaloide. la mujer viajó junto a su hermana Yanitza, donde recibieron 11 paquetes con droga y luego fueron aprehendidas junto al chofer.
Posteriormente, el camionero contactó a Gabriela Morales Nieves en esa misma ciudad, donde también le entregó 4 paquetes con cocaína. Esta mujer debía dirigirse a Santiago para traspasar la cocaína a un tercero.
Los detenidos fueron traídos en un avión de Investigaciones hasta Arica, tras su detención en la zona central. El fiscal Francisco Ganga formalizó a los ocho detenidos por tráfico ilícito de estupefacientes. Siete de ellos quedaron en prisión preventiva y sólo Yanitza Correa accedió a libertad provisional, ya que sólo fue imputada en carácter de cómplice.