José Ávila jefe del programa para asuntos penales y penitenciarios de la Defensoría del Pueblo explicó que a pesar de la facultad que tiene la administración penitenciaria para disponer los traslados de internos a nivel nacional, el penal de Challapalca no cuenta con las condicione adecuadas para recluir a presos de alta peligrosidad que serían trasladados del penal de Piedras Gordas.
Pero en el caso del traslado de 55 reos, el problema no es Challapalca, acotó; el problema es el penal de Piedras Gordas.
Ávila mencionó que este penal es considerado por el propio gobierno como el penal de mayor seguridad en el país, y lo preocupante es que no funcione de manera adecuada, ya que se argumenta que tienen problemas con los presos por el ingreso de celulares y es este hecho lo que los lleva a tomar la decisión del traslado hacia Challapalca.
"El problema es qué está pasando en Piedras Gordas, porque con toda la tecnología que el gobierno dice haber implementado aún hay ingreso de celulares y artefactos prohibidos", señaló José Ávila, y detalló que este penal tiene observaciones formuladas por la Defensoría del Pueblo y es cuestionado por parte de la Comisión Interamericana.
La mayor preocupación del programa para asuntos penales y penitenciarios es que Piedras Gordas fue construido con la categoría de alta seguridad para este tipo de internos por lo que no tendría la necesidad de trasladar internos a un penal que no cuenta con los estándares mínimos para recluir a este tipo de delincuentes.
José Ávila, indicó que vana solicitar un informe al INPE sobre la situación del penal de Piedras Gordas ya que este tipo de delincuentes no deben ser trasladados a otros penales que no cuentan con las condiciones para su reclusión.
