TEMAS DEL DIA:

Coronavirus | Elecciones 2021 | Elecciones en Tacna | Vacunación | Salud | Tacna | Vizcarra | Pedro Castillo

Autoridad Moral

Sin duda alguna, hay un extraño juego entre una izquierda burguesa (latinoamericana) que se adscribe fácilmente al sistema capitalista estadounidense y una derecha (latinoamericana) cada vez más cerca de un extremismo fundamentalista que ha negado sistemáticamente el valor de lo humano y desvirtuado el sentido de lo social- ecológico, cuya máxima significación sociológica es la involución cultural que está llevando a la pobreza endémica y, por consecuencia, a la deshumanización. ¿ Qué calidad moral tiene el actual gobierno norteamericano cuando alineó en la IX Cumbre de las Américas a algunos países latinoamericanos para que continuaran sometidos a su supremacía política, cultural y económica ? ¿ Alguien podría negar que los sucesivos gobiernos estadounidenses, demócratas o republicanos, han sido los principales responsables en la historia contemporánea de las recurrentes violaciones a los derechos humanos en diferentes países del orbe ? “No se detienen los procesos sociales ni con el crimen ni con la fuerza”(Salvador Allende). Gobiernos aparentemente “progresistas” de la región siguen estructurando su gobernanza a través de la cómoda conceptualización del libre mercado (Boric en Chile es un claro ejemplo de esta “nueva izquierda” que para el político consecuente y solidario tiene una definición demasiado contradictoria e inviable para los legítimos intereses del pueblo). En un grado de absoluta intolerancia, como país anfitrión de la reunión internacional, Estados Unidos vetó a tres países latinoamericanos que según el gobierno demócrata son regímenes antidemocráticos, olvidándose que en el mundo ya no hay lugar para el hegemonismo, sino sólo para el absoluto derecho de autodeterminarse políticamente. Esta IX Cumbre de las Américas, coordinada para restaurar el “liderazgo” norteamericano en la región y más que todo para proteger su seguridad interna (rol importante cumplió el principal asesor de Biden para asuntos latinoamericanos, el colombiano Juan Sebastián González, ex miembro del “Cuerpo de Paz”, agencia federal de avanzada de los servicios de inteligencia norteamericanos), ha permitido agendar en el último tiempo temáticas favorables a las políticas contradictorias, intimidatorias y expansionistas de Estados Unidos (incluido Canadá), contrarias a las políticas sociales de la izquierda real de muchos países regionales que han entendido la pobreza como una misión vital de renovación política, cometido que permitirá construir una nueva sociedad fraternal donde lo intersolidario será el pilar fundamental de la neo historia latinoamericana. Ergo, Estados Unidos no tiene autoridad moral para imponer un hegemonismo negligente, pues esa imposición simplemente es un atentado a la libertad de pensamiento, o sea, a los derechos humanos. La solución es proyectar un frente político-cultural unitario y una nueva capacidad pensante, es decir, cimentar un proceso acorde a los intereses populares que implique autonomía, y dignidad para todos los países de la región, única manera de erradicar el subdesarrollo y el sectarismo. “La historia es nuestra y la hacen los pueblos”. No cabe duda, entonces, que “más temprano que tarde” la derecha latinoamericana no tendrá ninguna posibilidad de gobernar en América Latina (el histórico triunfo de la izquierda colombiana encabezada por Gustavo Petro es un inequívoco ejemplo de trascendencia política, pues

debería estructurar e insuflar una nueva unidad popular latinoamericana), menos un populismo ignaro y cernícalo que inevitablemente conduciría a una dictadura conservadora (Bolsonaro en Brasil), ni siquiera contando con las pautas de los plutócratas, cáusticos y aporofóbicos, de Estados Unidos (en resguardo de una supuesta libertad “democrática”). Legítima y moralmente, la región está tendiendo a la innovación política y a la liberación económica para construir nuestro propio destino de manera definitivamente pacífica.