La Policía Federal de México relevó hoy al Ejército de su país en el resguardo del orden público en la convulsionada Ciudad Juárez, luego de que su presencia no ayudara a detener la escalada de violencia de asesinatos ligados al narcotráfico.
Alrededor de 5,000 policías con el apoyo de 510 unidades motorizadas blindadas y cuatro aeronaves, se desplegaron en puntos estratégicos de Ciudad Juárez, que tiene 1.5 millones de habitantes.
La zona de Ciudad Juárez registró en tres años más de 16 mil personas asesinadas y la mayor parte de ellas relacionadas a crímenes del narcotráfico.
El Ejército mexicano se retira en medio de cuestionamientos de abusos a los civiles durante sus operativos, no obstante, el alcalde José Reyes agradeció la participación de los militares en "contener" el crecimiento de la violencia.
Los militares no se retiran del todo de la zona, abandonan la parte urbana para ceder el control a la policía pero continuarán con el patrullaje y control de la zona rural y comunidades del valle de Juárez.
En marzo del 2009, el presidente mexicano, Felipe Calderón, ordenó desplegar 5,000 militares en Ciudad Juárez, urbe limítrofe con la ciudad estadounidense El Paso de Texas.
Los esfuerzos de los militares no fueron suficientes, solo en el 2009 se asesinaron a 2,700 personas en esta urbe mexicana.
Cortesía: Andina
