Miguel Jugo, secretario de la Coordinadora de Derechos Humanos, indicó que la crisis política tiene como responsable al Ejecutivo al ordenar este las estrategias de represión policial que han costado la vida de casi 60 personas en Perú.
«Estamos en una grave crisis y no hay respeto por los derechos humanos y eso lo acaba de decir la OEA ayer. Y lo que corresponde es basta ya de muertes y este conflicto que no se trata de un tema policial ni militar sino político se tiene que resolver urgentemente», expresó.
No dudó en afirmar que los muertos pesan sobre la presidenta Dina Boluarte y el premier Alberto Otárola, pese a que buscan desvirtuar información alegando datos que sindican intrusión de bolivianos, ponchos rojos que es una narrativa que tiene como objetivo someter el problema pues «todos escuchamos al ex almirante Cueto decir que tenían ubicados a todos los protestantes y que los iban a eliminar (…) ese mismo concepto se encuentra en los manuales contrasubversivos que utilizaba el Ejército la violencia entre el 80 y el 2000 que era matar a las personas», comentó.
Aseveró contar con información que «quien comenzó a disparar fue precisamente la Policía, no hubo arma de fuego entre los manifestantes y no hay herido de bala entre los policías». Siendo así, los responsables «serán juzgados por delitos de lesa humanidad y esos no prescriben, los van a perseguir toda su vida», enfatizó.