100 días de gestión y la ciudadanía a expresado su malestar contra el alcalde de Tacna Pascual Guisa, un desastroso 7 por ciento en la provincia y un 4 por ciento en el cercado le dan la espalda a quien fue elegido como el mejor vecino y, quien además debería liderar la solución de los pequeños problemas que cada día los vecinos tenemos que afrontar.
Lamentablemente, el alcalde parece no haber agarrado el timón de la municipalidad y la ciudadanía siente que sus principales problemas no tienen solución, esto lo pudimos vivir hace algunos días, cuando la población sufrió 3 días de recorte del servicio de agua potable; ante el mutis total de la autoridad.
Si le sumamos una crisis humanitaria, que toma parques, plazas, esquinas y calles, con gente que se acumula en la ciudad por las últimas medidas tomadas por los chilenos, teniendo un grupo de ellos vinculados a la delincuencia manteniendo en zozobra a quien transitan la ciudad.
Además, de funcionarios que no dan la talla, algunos de ellos cuestionados por pertenecer a gestiones anteriores con claros señalamientos de corrupción; con la tóxica relación con su teniente alcalde sentenciado por violencia contra la mujer, un jefe de seguridad ciudadana que amedrentaba a sus trabajadores, pero que es un gatito ante la delincuencia y por último no haber tocado hasta el momento la gestión de Julio Medina, que de corrupción estuvo plagada como la utilización de recursos de la subasta amañada de terrenos.
El comercio está deprimido, la frontera es un desastre y la conclusión es que los vecinos no creen que Guisa les soluciones sus problemas.