Gran sorpresa causó entre los transeúntes, un enjambre de abejas que invadió uno de los extremos del techo de un triciclo donde se expende golosinas, ubicado en la intersección de la Av. San Martín y la calle Apurímac.
Este hecho obligó a la propietaria a suspender la venta de sus productos en salvaguarda de su integridad física, ya que según informaron los efectivos de la policía ecológica que arribaron a la zona, las abejas podrían atacar si se sentían amenazadas.
Pese a que en todo momento las autoridades dieron la orden de no acercarse al enjambre, algunos ciudadanos lograron burlar la vigilancia logrando tomarse varias fotos.
Luego de realizar las coordinaciones pertinentes, la policía ecológica se contactó con un apicultor, quien tomaría las acciones necesarias para proceder a retirarlas de la mejor manera y sin causarles daño alguno.
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