Entre discusiones y amenazas pobladores no se enfrentaban a serenos de la comuna albarracina a lo largo del distrito. Sentados en columpios, toboganes y demás espacios públicos los intervenidos, en su mayoría varones, se disponían a libar licor.
Tal fueron las ganas de ingerir alcohol que a un grupo no se le ocurrió mejor idea que llevar sus sillas y conformar un pequeño bar en plena plaza pública. Una ambulancia del SAMU tuvo que hacerse presente para atender a algunos ciudadanos que estaban en coma etílico.