La Iglesia Católica de Cuba no cesará en sus esfuerzos por lograr que los trece presos políticos de la "Primavera Negra" del 2003, salgan en libertad, anunció el obispo cubano Arturo González.
"Hemos obtenido promesas y seguimos confiando en ellas y seguiremos trabajando para que se cumplan (la liberación) desde el amor de Jesucristo", dijo en conferencia de prensa en Miami.
Asimismo, descartó que la Iglesia Católica de Cuba presione al régimen de Raúl Castro para que libere a los presos políticos que se oponen al gobierno.
"La Iglesia no actúa con presión, y nunca se cansará de hacer el bien, es el reflejo de Jesucristo, no se cansará de tender puentes que conduzcan al bien del hombre, la familia y de la nación cubana", subrayó.
El obispo de Santa Clara en la provincia cubana de Villa Clara, Arturo González, se encuentra de visita en Miami, para oficiar misas y reunirse con sacerdotes estadounidenses en un acercamiento de las Iglesias Católicas entre ambos países.
La Iglesia Católica de Cuba, fue mediadora entre el régimen de Raúl Castro y presos políticos encarcelados al ser acusados de conspiración con Estados Unidos para socavar el gobierno cubano, por lo cual recibieron condenas de 28 años de prisión.
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