Pascual Montoya Rivera (62) reconocido empresario por su bodega en Collpa, desapareció el 11 de enero del presente año, cuando en horas de la madrugada salió de su vivienda ubicada en el distrito de Pocollay. En aquel momento vestía una pijama, llevaba una billetera más no celular, indicó el abogado Alex Choquecahua, denunciando desinterés policial.
Choquecahua quien asumió el caso hace un mes y medio, afirmó que el empresario era víctima de extorsión e incluso llegando a pagar en 2013 la suma de 5 mil soles, pero que las amenazas no habrían cesado, existiendo al día de hoy dos sospechosos (no reveló nombres), un hombre y una mujer domiciliados en cercanías de la casa del desaparecido, a quienes la PNP no ha llamado a declarar de manera célere, pero a insistencia suya, se ordenó citarlos hasta en tres ocasiones, cumpliendo la misma solo la mujer al tercer llamado, pero de manera virtual sin accionar la cámara, hecho quejado durante la diligencia.
«Se han presentado audios extorsivos (…) y no han sido objeto de transcripción y hay videos de entrega de dinero hace muchos años. He solicitado los videos, se tienen que visualizar», comentó.
Además, según el letrado, desde enero que el caso fue denunciado en el Departamento de Investigación Criminal (Depincri), área de desaparecidos, la PNP solicitó a la familia que «por estrategia no convenía mediatizar el caso porque los extorsionadores iban a desaparecer la evidencia y si se allanaba sus viviendas nunca se encontraría nada», pero a diez meses no hay resultado fructífero de la PNP motivando este martes 31 hacer público los hechos vía Radio Uno con la esperanza de sumar a la búsqueda equipo especializado de Lima tal como ocurrió en otros casos de desaparición en Tacna.
«A insistencia nuestra se ha tomado declaración de las hijas del desaparecido. La esposa también declaró», agregó la defensa al mismo tiempo de destacar que la familia recolectó imágenes de cámara de seguridad de viviendas dado que las de la comuna provincial no funcionaban aquel 11 de enero, así establecieron el recorrido que realizó Pascual Montoya desde su casa en Pocollay hasta llegar a inmediaciones del mercadillo Bolognesi, por avenida Basadre y Forero, en donde se pierde el rastro, pero este material tampoco sirvió para que la PNP apresure la búsqueda en la que se viene además solicitando el levantamiento del secreto de comunicaciones de los sospechosos.
Maltrato
A María Ochoa, al momento de colocar la denuncia, la PNP como chiste le decía «que se ha ido con otra mujer, usted tiene problemas matrimoniales». «Pero eso es falso jamás hemos tenido problemas con mi esposo», aseguró la denunciante.
En tanto, al abogado Choquecahua, tras asumir el caso, ha recibido como respuesta que «no tenemos tiempo, no tenemos personal, no tenemos logística». A la vez de argumentar la tesis de «fuga por deudas».
«Como cualquier empresa tenía (deudas), pero son pequeñas y se vienen pagando. La deuda no persigue a la persona sino al patrimonio, no tiene sentido fugarse por deuda», comentó Choquecahua al mismo tiempo de afirmar que «Si Depincri no tiene la capacidad entonces que pidan apoyo a Lima».
El caso está en manos del fiscal Percy Maquera Lupaca.
VIDEOS RECABADOS POR LA FAMILIA
AUDIOS DE EXTORSIÓN SINDICADA POR LA FAMILIA
