“Cerca de dos millones de venezolanos y solo el 10% tiene regularizada su situación en el país”, fue lo que señaló el excanciller de la República, Miguel Angel Rodríguez Mackay, quien se pronunció ante el proceso de deportación iniciado por el Gobierno.
La medida del Estado, anunciada con antelación, se trata de “una medida que no debe de ser consultada con nadie (…) es la soberanía del Estado la que decide las políticas migratorias”, puntualizó el extitular de Relaciones Exteriores al referirse a mal llamada expulsión de migrantes venezolanos.
Además, Rodríguez Mackay también fue enfático al referirse que “los venezolanos han tenido todo el tiempo del mundo para regularizar su situación en un país que les tendió la mano”, pues señalaba que la medida fue comunicada debidamente.
La medida adoptada por Perú se cataloga como deportación debido a que “la expulsión es cuando a los migrantes no se les quiere en el país”, acotó.
¿REFUGIADOS?
El exfuncionario advirtió a las cancillerías peruanas que no se dejaran sorprender por migrantes deportados que, posiblemente, podrían solicitar refugio contraponiéndose al concepto que engloba esta medida.
“La calificación de refugiados solo es posible para aquellos que son perseguidos por el gobierno y, en este caso, sería el de Nicolas Maduro (…) ellos -venezolanos- han salido por una crisis”, enfatizó.
Así mismo, recordó y exhortó a los estados de Ecuador y Colombia a que, si bien se convirtieron en un corredor para que los venezolanos llegaran a Perú, puedan actuar solidariamente y brindar las facilidades a los migrantes para su regreso a Venezuela.