El Papa Francisco aprobó el 25 de setiembre (2024) la expulsión de 10 miembros del Sodalicio de Vida Cristiana (SVC) de Perú, entre ellos su exsuperior general Eduardo Regal y el arzobispo emérito de Piura, José Antonio Eguren, por abusos físicos con sadismo, abuso de autoridad y contra la administración de los bienes eclesiásticos, informó la Conferencia Episcopal Peruana (CEP).
Esta medida se tomó un mes después de la expulsión del fundador de esta sociedad apostólica, Luis Figari, por las denuncias de abusos sexuales presentadas en su contra y otros directivos del Sodalicio, que fueron documentadas en el libro ‘Mitad monjes, mitad soldados’ de los periodistas Pedro Salinas y Paola Ugaz en 2015.
En conversación con Radio Uno, el periodista Pedro Salinas dijo, lo visto ahora es una purga de diez miembros y un último mensaje «inicien un camino de justicia y reparación a las víctimas», pero la reacción cinco días después «es seguimos en esto, bueno no entendieron». Y la reacción de los expulsados es tan asintomática como los expulsados.
«Las víctimas dónde quedan en esta historia ¿Quién piensa en las victimas? esa es la pregunta que sigue flotando en el aire y el Sodalicio no se atreve a tomarla», comentó.
Para Salinas, este negacionismo es un síntoma más de que son una organización sectaria, «no quieren ver lo evidente, están cegados y enajenados a la realidad. No son capaces de percibir todavía que el cierre es una posibilidad altísima, ya no es una posibilidad remota».
Vaticano expulsa a Luis Figari del Sodalicio de Vida Cristiana