La mayoría de los oficiales de partido (árbitros) son acusados de influir en los resultados contraviniendo la ética.
El organismo internacional que lidera el fútbol mundial tomó una drástica sanción contra árbitros que dirigieron partidos amistosos.
La Comisión Disciplinaria de la FIFA, presidida por el suizo Marcel Mathier, se reunió el 9 de agosto de 2011 para analizar dos casos: el primero de ellos afecta al oficial Lisle Austin, de Barbados, y el otro a los árbitros y árbitros asistentes bosnios Sinisa Zrnic, Kenan Bajramovic y Rizah Ridalovic, y a los húngaros Kolos Lengyel, János Csák y Krisztián Selmeczi.
En cuanto al primero, la comisión decidió prohibir a Lisle Austin el ejercicio de toda actividad relacionada con el fútbol, ya sea administrativa, deportiva o de cualquier otra índole, durante un año, por haber presentado una demanda sobre asuntos futbolísticos ante un tribunal ordinario de las Bahamas, lo cual supone una infracción del art. 64, apdo. 2 de los Estatutos de la FIFA. Lisle Austin ya había sido suspendido provisionalmente por el presidente de la Comisión Disciplinaria el 4 de julio de 2011, fecha a partir de la cual comenzará a computar la sanción de un año.
Asimismo, la Comisión Disciplinaria ha decidido que, en caso de que no se retire la demanda ante el tribunal ordinario de las Bahamas de forma definitiva e irrevocable, Lisle Austin no podrá ejercer ninguna actividad vinculada al mundo del fútbol nacional e internacional, de conformidad con el art. 22 del Código Disciplinario de la FIFA, mientras duren las diligencias judiciales en el tribunal ordinario. Sin menoscabo de lo anterior, la prohibición de un año debe cumplirse independientemente de que se ponga fin al proceso.
Por otra parte, se ha excluido de por vida a los seis oficiales de partido Sinisa Zrnic, Kenan Bajramovic, Rizah Ridalovic, Kolos Lengyel, János Csák y Krisztián Selmeczi de toda actividad relacionada con el fútbol, ya sea administrativa, deportiva o de cualquier otra índole, nacional e internacional. Los oficiales han sido declarados culpables de infringir el art. 62, apdo. 2 (corrupción pasiva) y el art. 69, apdo. 1 (influir en los resultados contraviniendo la ética) del Código Disciplinario de la FIFA. Esta infracción se cometió en los partidos internacionales «A», de carácter amistoso, entre Bolivia y Letonia y Estonia y Bulgaria disputados en Antalya, Turquía, el 9 de febrero de 2011.
(CORTESÍA: fifa.com)
