«Se realizó un acuerdo verbal para enseñar, no se cobraba, tampoco había presupuesto, pero se ha sacado buenos profesionales», así lo indicó José Anicama García, profesor de Taekwondo, en relación a las últimas acusaciones del alcalde de Pocollay, Hugo García Mamani, respecto a cobros que el instructor habría realizado a sus estudiantes, y que habría desencadenado el cierre del ambiente destinado a las clases de Taekwondo en el Polideportivo de dicho distrito.
A pesar de haber contado con el apoyo de anteriores gestiones, aceptó que con el nuevo alcalde no hubo acuerdo verbal, siendo el anterior gerente municipal, Adán Vargas Cárdenas, quien les brindó su apoyo para continuar con las clases en base a los logros que habían obtenido, sin embargo, con el actual gerente, Julio Huanca, no hubo acuerdo, y solo encontraron el ambiente que utilizaban para sus clases cerrado con candado, pese a conversaciones previas, sentenció.
Asimismo, Kimberly García, una de las madres de los estudiantes del profesor Anicama, mostró su rechazo hacia la actitud de la Municipalidad Distrital de Pocollay, que estaría buscando, a su parecer, el cobro de alquiler del espacio utilizado para otros fines, siendo su pedido y el de otros padres de familia que el profesor culmine el año y pueda retirar sus materiales, en caso no se llegue a un acuerdo con el alcalde.