Jorge «Pato» García, reconocido expolicía que contribuyó con el engrandecimiento de lo que fue el campeonato de fulbito «Amigos de la Policía», reflexionó sobre el papel que desempeña actualmente la policía y cómo su imagen va deteriorándose cada día.
Para el «pato», la falta de carácter en la institución se debe a la ausencia de valores que viene desde el entorno familiar. Refiere que ya no hay convicción de servir a la sociedad, por ende se perdió la confianza con la población.
«La disciplina ha muerto dentro de la institución, ya no te saludan así nomás (…) me intervienen, pero no hay ese respeto de preguntar, de saludar a la persona, los colegas de tránsito, tanto damas como varones, no te saludan y de frente te piden la documentación»
La Policía Nacional del Perú recordó hoy su 36° aniversario de creación institucional, en medio de la desconfianza y la incertidumbre de la labor que desempeñan sus efectivos. «El hecho de que la imagen del escudo, un emblema institucional esté en el tacho de basura es una pena, y solo refuerza ese pensamiento que la población ha perdido casi totalmente la confianza en la policía, ya no tiene confianza, por el contrario le tiene miedo», lamentó.
Pese a ello, García señaló que no todos los policía son malos, reforzando la idea que hay un grupo de efectivos que deshonra a la institución, y que la está haciendo quedar mal. Sostiene que viene del sistema actual que permite el mal accionar de algunos policías.
«Ha muerto la disciplina dentro de las escuelas, no hay esa disciplina férrea, es lamentable eso. Salen así nomás en 4 o 6 meses a patrullar, no salen con esa convicción como debe ser, con esa preparación de aprender a servir a tu sociedad, a tu patria, porque la población confía en ti como policía, para hacer cumplir la ley», remarcó.
Recordó además cómo era el campeonato de «Amigos del policía», en el que 3 mil a 4 mil niños participan semana tras semana. Señaló que ver las comisarías repletas de menores junto a sus padres le cambió la vida, haciendo que dedique mucho entusiasmo a su organización.
«Donde el pato García va siempre lo recuerdan, tanto en Cusco como en Huancayo, porque hay muchos que jugaron en el campeonato y hoy son profesionales y siempre me recuerdan, me saludan, eso es para mí satisfactorio, esas muestras de cariño, yo valoro el reconocimiento de la ciudadanía», finalizó.
