El exmandatario Martín Vizcarra llega a Tacna este viernes 10 para un gran rencuentro con simpatizantes en la plaza José Olaya del distrito Ciudad Nueva desde las 6:15 p. m., previo será recibido en el óvalo El León a las 5:00 p. m. pues estará llegando a la región procedente de Moquegua «probablemente esto se convierta en una caravana», expresó Marco Limachi coordinador del partido Perú Primero y excandidato a la región con el movimiento Frente Esperanza por Tacna (FE).
El sábado 11, Vizcarra estará a las 7:30 a. m. en Radio Uno, a las 8:45 a. m. en Jóvenes Unidos (franja de Viñani y Señor de los Milagros) del distrito Gregorio Albarracín en donde se reunirá con Santiago Curi que participará como precandidato al distrito albarracino por Perú Primero, al mediodía se movilizará al distrito La Yarada- Los Palos para inaugurar una base partidaria de Perú Primero en la asociación de vivienda Pueblo Libre y a las 4:30 p. m. tendrá un conversatorio con jóvenes en instalaciones del Sindicato de Construcción Civil en Arias y Aragüéz, cercado.
Como es sabido, Vizcarra ha ratificado su deseo de volver a ser presidente, pese a que en la actualidad cuenta con una doble inhabilitación que lo limita de ejercer puestos en cargos públicos, no obstante ha destacado que en un sistema democrático debe ser el pueblo peruano quien decida su destino.
Al respecto, Marco Limachi enfatizó «gran cariño de los peruanos» para con Vizcarra «y eso se demuestra hoy cuando ya no es presidente». Mientras «la clase política no lo quiere ver porque es una reacción de venganza porque él siendo ministro denunció al club de la construcción, porque ahí había todo un manejo interno para repartirse las obras, y también haber cerrado el Congreso, por eso no lo quieren ver en el escenario del año 2026, cualquier estrategia harán para bloquear su candidatura», agregó.
Martín Vizcarra fue el candidato al Congreso más votado en las elecciones generales de abril de este año, pero no pudo asumir porque fue inhabilitado por el Parlamento para ejercer cualquier cargo público durante diez años por haberse vacunado sin decirlo contra la COVID-19, en un caso conocido como el «Vacunagate». El 9 de noviembre de 2020, fue sido destituido por el Congreso, que dominaba el fujimorismo, por «incapacidad moral» tras ser acusado de cometer actos de corrupción cuando fue gobernador de la provincia de Moquegua (2011-2014).
