Saliendo de los conos de la ciudad y encabezados por dirigentes de diversos frentes sociales y gremiales, esta mañana se desarrolló en Tacna una movilización pacífica por las principales calles de Tacna como muestra de rechazo a la minera Southern y a la decisión de las autoridades que decidieran suspender la medida de protesta la noche de ayer.
Desde diferentes puntos de la ciudad pero con una sola intención de lucha, diferentes frentes de defensa y gremios organizados de la ciudad se concentran y movilizan por las principales calles de la ciudad. Mientras un numeroso grupo sale del distrito Gregorio Albarracín hacia el centro de Tacna, otro grupo se reúne en la plaza Zela a la espera de la llegada de otros frentes que se sumarán a la medida de protesta.
Con pancartas en mano y fuertes arengas en sus gargantas, este grupo de la sociedad civil organizada decidió tomar la batuta de la representación tacneña y salir a las calles, dejando en claro que no les intimida ni las “exhortaciones” del Ministerio Público ni los atemoriza la suspensión de la paralización de parte de las autoridades en la noche de ayer.
Esta protesta no acabará en las calles, la finalidad de este grupo social es llegar a las principales instituciones públicas para exigir a las autoridades que respeten el acta que ellos mismos suscribieron donde daban plazo al ejecutivo para instalar la mesa de diálogo hasta el 30 de septiembre, punto que consideran no se ha cumplido a la fecha pese a la anulación de la Audiencia Pública.
La movilización pacífica arrancó en la Plaza Zela, posteriormente los manifestantes tomaron la Av. General Vizquerra, pasaron por la Av. Leguía para luego pasar por la Av. Patricio Meléndez y tomar la Av. San Martín, zona que recorrerán hasta llegar a la gobernación para entablar un diálogo con Dora Quihue y hacerle entrega de un memorial suscrito por dirigentes locales de diferentes gremios. Posteriormente se dirigirán al municipio local y luego hasta el búnker presidencial.
Un regular contingente policial acompaña la marcha y un nutrido grupo de otros uniformados resguarda las instituciones públicas para evitar desmanes, aunque dirigentes han garantizado que la marcha se realizará en forma pacífica.