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El Premio Nobel de Química del que se burlaban los científicos

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Cuando Daniel Shechtman observó en su microscopio electrónico una mezcla de aluminio y manganeso fundido que había sido previamente congelada, encontró algo que no esperaba.

Los átomos del nuevo cristal estaban perfectamente formados en un patrón geométrico que nunca se repetía. Este descubrimiento, que ocurrió exactamente el 8 de abril de 1982, lo hizo merecedor este miércoles del Premio Nobel de Química. Su trabajo, dijo el jurado, «cambió fundamentalmente la manera en que los químicos conciben la materia sólida».

Sin embargo, pocos podían augurar un futuro tan prometedor para este científico israelí.

Burlas  

Tan inesperado y controvertido fue su hallazgo –se creía que todos los cristales estaban formados por patrones que se repetían periódicamente- que le valió en su momento duras críticas, e incluso la burla de la comunidad científica.

«Fui ridiculizado, mis colegas me trataron mal y el jefe de mi laboratorio se acercó a mí con una sonrisa condescendiente, puso un libro en mi escritorio y me dijo: ‘Danny, ¿por qué no lees esto y ves que lo que estás diciendo es imposible?'».

La reacción inicial de sus colegas no desanimó al científico. En 1984 logró que una revista especializada publicara su teoría y, el resto, es historia. En una entrevista a una radio local, Shechtman reconoció estar muy «emocionado» con este reconocimiento.

Usos prácticos

Los cuasicristales –a los que también se conoce como sólidos cuasiperiódicos- están conformados, como descubrió Shechtman, por unidades que no se repiten. Por su aspecto, muchos los comparan con los mosaicos árabes.

Son materiales que se crean en el laboratorio pero también ocurren en la naturaleza. Una de sus características es que son malos conductores de la electricidad y extremadamente resistentes a la deformación. Los científicos están investigando el uso de cuasicristales en productos tan comunes como sartenes, lámparas led y motores a diesel.

Shechtman recibirá por su descubrimiento US$1,4 millones.