Hoy en todo el mundo fieles católicos conmemoran la festividad de la Inmaculada Concepción en que se realizan en la mayoría de parroquias, celebraciones eucarísticas entregando la primera comunión a niños y jóvenes. En esta fiesta, la iglesia recuerda la concepción sin pecado de la Madre de Dios y esta mañana en la Catedral de la ciudad se desarrolló una ceremonia presidida por el Obispo de nuestra Diócesis.
Monseñor ofició misa conmemorativa a Inmaculada Concepción
Miles de fieles en todo el mundo y en nuestro país conmemoran hoy la festividad de la Inmaculada Concepción de María, en que la Iglesia recuerda el inicio de la gestación de la Madre de Dios en el vientre de su madre Santa Ana, tras ser preservada del pecado original.
Nuestra Diócesis no podía estar ajena a la festividad y hoy por la mañana en la Catedral de Tacna se desarrolló una ceremonia eucarística presidida por el Obispo Marco Antonio Cortez, quien en una reflexiva homilía recordó a la feligresía presente la concepción de María que desde su gestación estuvo preservada para ser madre del Hijo de Dios, pero sin considerarse pieza fundamental, sino únicamente “la esclava del Señor”.
“María no es una persona lejana. Dios la dispuso como madre de su Hijo y madre nuestra. María tiene dos clases de hijos y ella se dedica más a los que necesitan más de ella para acercarse a Jesucristo. María no pide nada para ella sino para su hijo. A los más necesitados dedica más su ingenio y su creatividad y se manifiesta a los fieles diciendo que su hijo sufre por nuestros pecados. La Madre de Dios nos ayuda también a cumplir nuestra misión y llamado que es ser santos. Ella es el camino más corto para llegar a su Hijo”, indicó.
El dogma de Inmaculada Concepción fue declarado como dogma en el año 1884 por el Papa Beato Pio Nono pero ya antes la feligresía católica consideraba sin mancha a la Virgen María. Sin embargo fue a partir de esta fecha, un 8 de diciembre en que se recuerda la proclamación del dogma y en muchos países del mundo se declara feriado nacional.
Adicionalmente a la fiesta, en esta fecha miles de niños en todo el mundo reciben por primera vez la comunión de Cristo y se preparan con un corazón inmaculado a recibir el cuerpo del Mesías, de la misma forma como María lo acogió en su vientre.