El distrito de Ticaco en la provincia Tarata, es una zona eminentemente agrícola y turística, que hoy se encuentra en alerta ante recientes solicitudes de concesión minera que amenazan la cabecera de cuenca del Apu Comaile. Las autoridades y líderes locales como Luis Ticona y Andy Condori se pronunciaron en contra de la minería durante transmisión especial de Radio Uno desde el distrito, destacando que el futuro de la agricultura y el turismo depende de la defensa del recurso hídrico.
El Cerro Comaile, considerado el Apu principal de la zona, alberga una laguna de agua a mitad del cerro que funciona como una vertiente natural y es la fuente principal de líquido elemento para la comunidad. Anteriormente, la empresa Newmont Perú se había ubicado en el punto de prospección donde se encuentra la reserva de agua, aunque ya se ha retirado.
Sin embargo, nuevas solicitudes de concesión han puesto en riesgo cerca de 9.000 a 10.000 hectáreas (ha). La empresa Olimpo está solicitando aproximadamente 4.000 hectáreas (Olimpo 2: 1000 ha; Olimpo 3: 700 ha; Olimpo 4: 900 ha; Olimpo 5: 900 ha). Otras empresas también buscan concesiones, incluyendo Valentina 1A y 2A (1000 hectáreas cada una) y Roma (solicitando un total de 1800 hectáreas en dos solicitudes).
El riesgo principal es que la entrada de cualquier empresa extractiva secaría toda la campiña y este sector. Los agricultores señalan que las empresas mineras buscan posicionarse en la cabecera de Cuenca justamente porque necesitan el recurso hídrico para la explotación de mineral.
El alcalde de distrital, Fredy Leoncio Arcaya Canqui mencionó que coordinaría con el gobernador y el alcalde provincial Kenny Menéndez para fijar una posición sobre la amenaza de concesión. Y es que, el respeto por el agua es un elemento central en la vida de Ticaco. La comunidad canta al «espíritu del agua,» y sus ancestros establecieron la «fiesta del agua» conocida como la fiesta del Komaile.
La población mantiene un consenso claro: «minas no, aguas sí». El cerro Apu Comayle es visto como un «transformador natural de agua». Existe la preocupación de que la minería pueda desaparecer este cerro, el cual «regula todo».
Es más, la distribución de agua se coordina diariamente a través de asambleas que se realizan todas las mañanas a las 6:00 a. m., un rasgo cultural distintivo de Ticaco es que las mujeres «mandan» en la gestión del agua. Esta costumbre se remonta a la época de la guerra con Chile. Durante la ocupación de Tarata, los chilenos disparaban («palomeaban») a los varones peruanos que transitaban por las calles o chacras. Ante el peligro, las mujeres se reunían todas las mañanas para coordinar cómo repeler los ataques, distribuir el agua y trabajar las parcelas.
La agricultura es su forma de vida y les permite sobrevivir felizmente con pocos problemas de salud, a diferencia de otras zonas afectadas por el plomo y el cáncer. La defensa de esta vertiente es fundamental para la vida de las generaciones futuras y sustento de su población, que con mucho esfuerzo logró la Denominación de Origen del Orégano Peruano en 2024 con apoyo del gobierno regional, específicamente para el «orégano de Tacna».
Fomento del Turismo y Desarrollo Local
La población ha apostado por el desarrollo a través del turismo. Ticaco ya cuenta con experiencia en este ámbito, habiendo desarrollado un mirador, baños termales y un hotel, y ahora sumando un centro de artesanía.
La municipalidad distrital de Ticaco y la comisión de regantes han presentado recientemente (hace aproximadamente un mes) un expediente al Ministerio de Cultura para declarar la festividad del pago del agua del Apu Comayle como Patrimonio Cultural de la Nación.