Una fuerte réplica sintió la Presidente de Chile, Michelle Bachelet, cuando se encontraba verificando la magnitud de los daños producidos en las localidades azotadas por el sismo de 7.7 grados en la escala de Richter que se registró de ayer al mediodía (10:42 hora peruana) en el "Norte Grande" del vecino país del sur.
"Tranquilos, para eso estamos aquí", expresó una calmada Bachelet dirigiéndose a los pobladores de Tocopilla (ubicado a 1,550 km. de Santiago), sector más afectado por el movimiento telúrico, mientras la tierra temblaba a una intensidad de 6,8 grados Richter,
En una primera reacción, el gobierno "mapochino" ha destinado una remesa de nueve toneladas de ayuda humanitaria, que servirá para atender a los 15 mil damnificados y más de un centenar de heridos.
El Gobierno dispuso el envío el jueves de nueve toneladas de ayuda para los 15.000 damnificados y el centenar de heridos que dejó el terremoto, que provocó la muerte de dos personas en la ciudad costera de Tocopilla, una de las más castigadas, a unos 1.550 kilómetros al norte de la capital chilena.
Dicho material logístico está compuesto por viviendas de emergencia y nueve toneladas de medicinas, alimentos no perecibles y frazadas. Adicionalmente se ha dispuesto un hospital de campaña.
Tocopilla, donde se registraron las dos únicas víctimas mortales, es una localidad de poco más de 24 mil habitantes. El panorama se presenta desolador, con casas destruidas, largas colas de personas que intentan abastecerse de alimento en las puertas de las tiendas que se mantienen en pie y rostros de preocupación y dolor.
La electricidad y el agua potable se han reestablecido paulatinamente, mientras que las vías de acceso no han sufrido grandes averías.
Por su parte, las empresas mineras que operan en el sector han reanudado sus actividades a medida que superaron los daños en sus instalaciones extractivas de La Escondida -la mayor de cobre del mundo- Spence y Cerro Colorado.
Mientras que la gigante CODELCO aseguró que sus enormes minas en el norte de chileno operaban "con absoluta normalidad" tras la interrupción que las afectó después del sismo.
En tanto, un grupo de trabajadores que se encontraba atrapado en un túnel en la carretera que une Tocopilla con Iquique fue rescatado durante la madrugada, sin novedad alguna.
El último informe brindado por la Oficina Nacional de Emergencias del Ministerio del Interior (ONEMI) arrojó 15.000 personas damnificadas y 4.000 casas entre afectadas y damnificadas, es decir dañadas o echadas al suelo.