Los restos de la víctima de feminicidio fueron velados en la asociación Alto Bellavista del distrito de Alto de la Alianza. En tanto que el entierro se realizó en el cementerio de Pocollay.
Irene Cori Charca murió en manos de su pareja, quien usó una comba para golpearla en la cabeza.
Por la mañana los restos de la comerciante Irene Cori Charca (35), fueron velados al interior de su vivienda ubicada en la Asociación Alto Bellavista Mz-C Lt-14 del distrito de Alto de la Alianza. En todo momento sus familiares guardaron total hermetismo frente a las investigaciones que se realizan en torno al asesinato de la madre de familia.
Cori Charca falleció ayer luego que su pareja, el mecánico automotriz Rogelio Vilca Pilco (39), le asestára varios combazos en la cabeza al enterarse que fue engañado, según fuentes policiales.
En seguida fue hasta la casa de su suegro, Gregorio Cori, para entregarle las llaves del inmueble donde asesinó a la comerciante y luego le pidió perdón.
Mientras que Rogelio Vilca Pilco era detenido por la policía, los vecinos informaban que sus dos hijos de 7 y 11 años permanecían en el colegio sin enterarse de lo ocurrido.
Esta tarde desde su vivienda en Alto Bellavista, donde fue asesinada, partió el cortejo fúnebre hacia el cementerio de Pocollay.