El congresista de Fuerza Popular Julio Rosas aprovechó el caso del extransexual Fernando Ñaupari Buendía para promover la aprobación de un proyecto de ley que permitiría la ”reorientación sexual y el derecho a la identidad”. Sin embargo, la llamada ”reorientación sexual” tendría como fin subliminal la ”sanación” de los miembros de la comunidad LGTB (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales), que no es vista con buenos ojos por la feligresía evangélica, de la que es ferviente integrante el legislador fujimorista.
¿Lobby evangélico en el Congreso? Parlamentario Julio Rosas apela al caso de extransexual Fernando Ñaupari, convertido al cristianismo, para sustentar iniciativa legislativa
Este acto de respaldo resulta muy extraño y hasta contradictorio con el proceder de un bloque de parlamentarios cristianos del fujimorismo que hace unos días lograron que la Comisión de Fiscalización del Congreso eliminara “la orientación sexual e identidad de género” como agravante a los delitos motivados por discriminación en el dictamen de ley que modifica el Código Penal.
Como se sabe, Fernando Ñaupari es un extransexual que, tras convertirse al evangelismo, ahora reclama su DNI como varón. El legislador Julio Rosas buscaría facilitar la tramitación del documento nacional de identidad para aquellas personas que se cambiaron de sexo y deciden regresar al que tenían al nacer.
La vocera del MHOL, Verónica Ferrari, señaló que, hace unos meses, desde el Congreso se vienen sacando leyes o iniciativas que recortan los derechos de la comunidad LGTB.
CONTRABANDO DE DERECHOS
Para el abogado Ronald Gamarra, el abierto respaldo del parlamentario Julio Rosas a la “reorientación sexual” sería una especie de “contrabando” de derechos disfrazados.
“Más que pedir un derecho de identidad, esta figura esconde en el fondo una posición netamente homofóbica, donde la homosexualidad se entiende como una enfermedad que necesita ‘curación’. Es una excusa para limitar los derechos sexuales y reproductivos de los afectados, quienes tienen derecho de elegir y vivir en plenitud”, explicó.
A su vez, remarcó que le parece extraño que los fujimoristas, promotores de una ‘cruzada por la moralidad’, hayan tomado el caso de Ñaupari Buendía, y más aún cuando esta persona ha ‘demostrado’ que un transexual puede redimirse espiritualmente para volver a asumir el sexo con el que nació.
