El congresista Manuel Dammert sostuvo que el operativo militar que abatió a las cabezas del grupo terrorista afincado en el Vraem, «Alipio» y «Gabriel», repercutirá en las organizaciones de narcotraficantes de la zona, ya que ambos fungían como una red de apoyo para la ilícita actividad.
Congresista, Manuel Dammert. (Foto: Internet)
En comunicación telefónica con RADIO UNO, el legislador saludó el golpe atestado contra el terrorismo en el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), en el cual cayeron los mandos terroristas Alejandro Borda Casapalca » Alipio», y Marco Antonio Quispe Palomino » Gabriel», considerados como los número 1 y 2 en la estructura militar de Sendero Luminoso en el Vraem.
“Lo que ha ocurrido es un acontecimiento importante porque se ha desarticulado la cabeza de un grupo terrorista vinculado al narcotráfico, en ese sentido hay que decir que es un triunfo de todo los peruanos”, indicó.
Agregó que se trata de un duro golpe contra la estructura de Sendero Luminoso en el Vraem y un triunfo parcial contra el narcotráfico apostado en la zona, ya que los remanentes terroristas fungían como una red de apoyo para la ilícita actividad.
“Me parece clave también apreciar que este es un triunfo parcial al problema fundamental que afecta a todo el Perú: nos hemos convertido en un país que exporta cocaína, nuestro principal producto de exportación es la cocaína y tenemos el riesgo de que el Estado inclusive pueda ser infiltrado y controlado por el narcotráfico. De ahí la importancia de desactivar los fundamentos mismos del narcotráfico, que en el caso de Vraem está todavía vivito y coleando y tiene muchísima influencia. Está bien haber enfrentado y derrotado a las cabezas de este grupo terrorista, que eran mercenarios del narcotráfico, pero hay que continuar en una lucha efectiva y firme contra el mismo narcotráfico”, señaló.