Luego de tres sesiones consecutivas en que estuvo ante la Sala Penal Especial que juzga a Alberto Fujimori, el ex jefe de la DINTE, general Juan Rivero Lazo culminó su testimonio", donde negó y desconoció, toda responsabilidad con los crímenes del destacamento Colina, así como la existencia de playa La Tiza, lugar de entrenamiento de "Colina" y haber autorizado el destaque de los agentes que conformaron el destacamento criminal, como lo han ratificado diversos testigos.
Asimismo la entrega de armamentos y que el propio general Hermoza Ríos le haya ordenado cerrar la empresa COPRAMSA, que sirvió de fachada a las acciones del grupo criminal. Y por supuesto que también dijo que nunca se reunió con Vladimiro Montesinos. "Yo iba al SIN una o dos veces al mes pero a reunirme con Salazar Monroe, no con Vladimiro Montesinos. No recuerdo que Silva Mendoza me haya informado que Montesinos lo nombró como jefe del SIN", señaló.
Sin embargo, en muchas partes del interrogatorio, Rivero Lazo, terminó entrando en graves contradicciones, cuando tras su negativa sobre diversos documentos y luego de mostrarse los mismos, no le quedaba otro recurso que repetir: "Ahora sí lo recuerdo", como cuando negó que Martin Rivas lo hubiera visitado a su casa, y luego de leerle una anterior declaración al respecto, tuvo que retractarse.
Miguel Jugo: "Rivero ha venido a protegerse"
Con relación a lo declarado por el testigo, Miguel Jugo, Director de la Asociación Pro Derechos Humanos, APRODEH, sostuvo que "Rivero Lazo ha venido a protegerse, ya que entendemos él va a ser condenado por los casos de Cantuta y Barrios Altos por los que viene siendo procesado, y por eso es que ha comenzado a olvidarse de todo, y no recuerda nada. Sin embargo, las contradicciones en que ha incurrido, además de los testimonios del propio Hermoza Ríos y Pérez Documet, lo terminan incriminando".
En su opinión, el testimonio de Rivero Lazo ha sido casi una formalidad que había que cumplir, pues "son testimonios que hay que recibir, y lo más importante será lo que venga más adelante con los otros testigos, sobre todo con el testimonio próximo del periodista Umberto Jara", remarcó el director de APRODEH.
Gisela Ortiz: "No esperábamos nada bueno de este testigo"
Por su parte, Gisela Ortiz, hermana de Enrique Ortiz, uno de los nueve estudiantes asesinados de La Cantuta por el Grupo Colina, sostuvo que como familiares "nada bueno esperábamos de su presencia como testigo. Quienes lo hemos visto en el anterior proceso en la Base Naval hemos escuchado ya esos argumentos inverosímiles que desde un principio viene sosteniendo, como por ejemplo que le prestó dinero a Pichilingüe para la conformación de la empresa COPRAMSA porque le parecía "un buen muchacho" pero que no lo conocía".
Sobre sus expectativas para los futuros testimonios de los altos mandos militares, señaló que si bien no esperábamos mayores aportes de Rivero Lazo para el esclarecimiento de los hechos, las posturas, actitudes y negativas serán importantes para la valoración de la Sala en tanto hay documentos que ellos firmaron que avalan la existencia de este destacamento y la libertad que tenía para actuar. "Por ejemplo, están los testimonios del Teniente Aquilino Portella, quien después trabajó bajo sus órdenes, o de Velarde Astete, en el caso de la reunión con altos mandos para aprenderse los libretos de su defensa para el juicio militar, y del mismo General Pérez Documet, que es un militar de más antigüedad", dijo Gisela Ortiz.
Sin duda, la expectativa de los familiares y de los abogados de la parte civil, están centradas ahora en el testimonio del periodista Umberto Jara, quien se presentará el próximo viernes y, según ha trascendido, presentará nuevos videos que seguirán complicando al situación del acusado Fujimori