Milenaria ceremonia preside lo que será su juramentación al cargo de presidente de Bolivia a realizarse el jueves.
(Foto: Referencial)
El presidente de Bolivia, Evo Morales, participa de ceremonia indígena ancestral como líder de los pueblos originarios para su tercer mandato presidencial.
La ceremonia tradicional se lleva a cabo en la zona arqueológica de Tiahuanaco, a 71 kilómetros de La Paz, donde se asentó una de las culturas más longevas del continente americano.
En el lugar se dieron cita unas 50.000 personas quienes quienes son testigos de este ritual, en el que Morales recibe de manera simbólica «energías positivas» para su tercer mandato (2015-2020). Morales asumió por primera vez el poder el 22 de enero de 2006.
De acuerdo con el programa oficial, el ritual concluirá a las 10:30 horas locales (14:30 GMT), y posteriormente el presidente boliviano emitirá un mensaje desde la puerta principal del templo de Kalasasaya.
En 2006 y 2010 se realizaron en Bolivia ceremonias similares en el mismo sitio arqueológico para los primeros dos mandatos de Morales, aunque en esta ocasión su traje tendrá mayores detalles ornamentales.
El ritual se efectua un día antes del juramento oficial del presidente, que se llevará a cabo el 22 de enero ante la Asamblea Legislativa (órgano bicameral) Plurinacional de Bolivia.
VESTIMENTA. El artista responsable del diseño de la vestimenta de Morales, Dennys Ramos, explicó que los materiales y la confección del atuendo que lleva el mandatario boliviano en la ceremonia tradicional tienen un valor superior a los 4.000 dólares.
Esta indumentaria incluye una iconografía repujada en oro, aunque en la estimación del costo no se considera el diseño de la prenda, ya que se hizo de manera gratuita.
El gobernante está vestido con un gorro ceremonial o «Chuku» de cuatro puntas con una figura del sol repujada en oro, copiada de la «Puerta del Sol» de Tiahuanaco.
Lleva puesto una túnica o «Unku» tejida en fibra de vicuña, que tiene una pechera repujada en el mismo metal precioso, así como un báculo o cetro y abarcas.
Ramos indicó que la vestimenta está cargada de símbolos que tienen como objetivo «asegurar una buena gestión» al mandatario.
«El Chuku de cuatro puntas simboliza antenas para traer la buena energía del cosmos», mencionó.
(Andes)